Lucía Crespo alza la voz por su hija Cataleya: “El colegio ya no es un lugar seguro para ella”

Lucía Crespo es una madre de la provincia de Cáceres que ha alzado la voz para denunciar públicamente la situación que vive su hija de seis años, Cataleya, después de que el CEIP Obispo Álvarez de Castro haya tenido que prescindir del apoyo de su cuidadora, una figura esencial para el desarrollo escolar y el bienestar diario de Cataleya. 

La situación ha generado una profunda preocupación en la familia, que reclama a la Junta de Extremadura una solución urgente. Cataleya es alumna de tercer curso de Infantil, y tiene seis años. Ha sido ayudada durante tres años y medio por la misma cuidadora, Nines, que se ha convertido en una segunda madre para Cataleya.

Por eso, la profesora ahora, además de lidiar con una clase entera de primero de primaria, tiene que encargarse de Cataleya, teniendo que ayudarla en llevarla al baño o sus cuidados básicos.

Lucía Crespo atendió a la Cadena COPE en Cáceres. Puedes escuchar la entrevista completa pinchando en la imagen.

¿Cuál es la situación de salud de Cataleya? ¿Por qué necesita una cuidadora?

Mi hija está reconocida por el CADEX con discapacidad. Nació con 25 semanas, y eso le ha provocado unas secuelas importantes, graves. Por eso necesita una cuidadora todos los días en el colegio, para poder ayudarla y apoyarla.

Nines ya no está como cuidadora. ¿Por qué?

Ya no está por unos contratos, supuestamente irregulares, que se hicieron hace tres años. Ahora la Junta de Extremadura quiere regular esos contratos, pero eso pone en peligro a nuestros hijos extremeños. Por intentar acabar con esos contratos y regularizarlos, nuestros hijos se quedan sin sus cuidadores.

¿Y no tenéis información sobre cuándo podrían asignar a otro cuidador?

No sabemos nada. No tenemos información de cuándo van a poner a otros cuidadores. Así estamos.

¿Qué supone esto para tu hija, para Cataleya, quedarse sin cuidadora?

Supone que está en peligro, que no tiene sus cuidados del día a día. Ir al baño, ayudarla a comer, subir o bajar escaleras. Cosas que para nosotros son básicas, pero para ellos son muy importantes.

Por ejemplo, ¿ahora cómo va al baño?

Ahora va al baño con su profesora, que la ayuda, pero ese no es el trabajo de la profesora.

Es decir, a los profesores se les está sumando una tarea que no les corresponde. Y, sobre todo, estamos hablando de la pérdida de una figura fundamental para niñas como tu hija. ¿Qué tenéis pensado hacer?

Con el colegio hemos mandado cartas a la Delegación Provincial de No Docente en Cáceres. Yo, además, he hecho publicaciones en redes sociales para denunciar lo que está pasando. Y no voy a parar, seguiré luchando hasta que me den una solución, y que sea una solución duradera.

¿Hasta qué edad necesitaría tu hija una cuidadora?

Mi hija necesitará cuidadora hasta que acabe sus estudios.

Estamos hablando, entonces, de hasta cuarto de la ESO.

Sí, eso es.

¿Y qué tareas le ayuda a realizar la cuidadora en su día a día?

Ir al baño, ayudarle a comer, subir y bajar escaleras o vestirla.

¿Cuál es el problema que tiene concretamente Cataleya?

Cataleya tiene un problema en el cerebelo, tiene parálisis cerebral. Eso le afecta en muchas cosas del día a día: andar o manipular objetos.

¿Y qué os han dicho en el colegio?

Nos dicen que no depende de ellos, que depende de la Junta de Extremadura. El colegio no tiene nada que ver con esto. Lo único que puede hacer es pedir que se dé una respuesta, pero hasta ahí pueden llegar.

¿Han solicitado ese refuerzo?

Sí, sí, está solicitado. Pero hasta la propia administración no sabe. De verdad, es una vergüenza. En cualquier empresa, si falta un trabajador, al día siguiente la empresa se encarga de sustituirlo. En este caso no. Aquí hay un abandono total por parte de las administraciones. Y se pone en peligro a estos niños. Porque no solo es Cataleya, son todos los niños de Extremadura con discapacidad los que están en la misma situación.

¿Y cuál es el motivo? 

Significa que se hicieron contratos de seis meses, y según la ley, después de ese tiempo deberían haberse hecho fijos. Pero no lo hicieron así, iban renovando cada seis meses. Y como ha habido un cambio de partido en la Junta, han querido regularizar esos contratos. Me parece bien que se regularice, pero no pueden abandonar a estos niños. No es justo ni es legal. Y si hace falta coger abogado, lo haremos.

¿Cómo está Nines después de todo esto?

Imagínate. Nines está muy triste. Mi hija igual, todos los días pregunta por ella. Yo le he dicho que está de vacaciones, para que no se ponga peor, para que no se entristezca más. Estamos en una situación desesperante. Como madre, dejar a mi hija en el colegio me cuesta.

¿Esperáis que vuelva Nines o que se incorpore algún otro cuidador pronto?

Espero, de verdad, que vuelva Nines. Lo deseo con todo el corazón. Solo quiero que mi hija sea feliz y que no corra ningún peligro en el colegio.