Reclaman a la Inspección de Trabajo que compruebe si en La Asistida hay EPIS y test para los trabajadores

Familiares de mayores ingresados en la Residencia Asistida ‘El Cuartillo’ de Cáceres han solicitado a la Inspección de Trabajo de la Seguridad Social (ITSS) que compruebe si los empleados cuentan con los adecuados equipos de protección individual (EPIs), y que se someta de nuevo a toda la plantilla a test rápidos.

La petición se ha elaborado conjuntamente por los familiares. En ella reclaman a la Inspección que formule un requerimiento a la residencia y al Sepad extremeño para que comprueben si los trabajadores cuentan con los correspondientes EPIs y, en caso contrario, instarles a proveerles de ellos. También han solicitado que se vuelvan a repetir los test rápidos a toda la plantilla, como recomiendan las autoridades sanitarias.

El escrito recoge que en "múltiples ocasiones" se ha denunciado por parte de los trabajadores que las pruebas no se les han repetido a los 15 días como es preceptivo, ni han sido acompañadas de pruebas serológicas ni de PCR, "ni han resultado fiables".

Esta reclamación llega después de que el pasado viernes la Cadena COPE en Extremadura adelantara que los propios familiares de fallecidos en este centro, el más grande de la Comunidad Autónoma, se van a unir en una querella por la vía penal contra el consejero de Sanidad y Servicios Sociales, José María Vergeles, contra el SEPAD y contra la dirección de esta residencia que acumula, según cifras oficiales, cerca de 80 fallecidos.

También recuerdan que el Defensor del Pueblo insta al SEPAD "a suplir las bajas laborales de los trabajadores para garantizar el cuidado adecuado de los mayores", y a dar "información continua". Los familiares desconocen cuántos de los 253 empleados se encuentra de baja o están infectados, y si han sido sustituidos.

DESINFECTADA POR CUARTA VEZ

Los militares han descontaminado por cuarta vez la residencia ‘El Cuartillo’ de Cáceres (la Asistida) para ayudar a poner freno a los contagios dentro de este geriátrico, el mayor de Extremadura y el más afectado de la región por la pandemia.

La Brigada Extremadura XI ha fumigado de nuevo las instalaciones durante la jornada del viernes. Ya lo hicieron a final de marzo y a mediados de abril, para volver a principios de mayo y repetir otra vez hace dos días la desinfección de esta gran residencia, con capacidad para 320 ancianos.

Las familias lamentan que, a la vista de los datos, de los 320 residentes, 216 han resultado infectados y 74 han fallecido.