Empleados públicos exigen entre gritos el pago de la deuda salarial de 2020

Más de un centenar de empleados públicos se han reunido este jueves a las puertas de la Asamblea de Extremadura para reclamar a la Junta el pago de una deuda pendiente desde el año 2020. Convocados por la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF), los trabajadores exigen el abono del 2% de la subida salarial aprobada en su momento y que aún no han recibido, así como la actualización del kilometraje para aquellos que utilizan su vehículo personal en el desempeño de sus funciones.

El presidente autonómico de CSIF Extremadura, Benito Román, ha encabezado la manifestación, en la que los asistentes coreaban consignas como "¡Basta ya!" y "¡Sube la gasolina!", haciendo eco de la frustración acumulada en los últimos tres años. Con pancartas en mano, los manifestantes no solo han pedido el pago de los 11 meses correspondientes a 2020, sino también la actualización del kilometraje a 0,26 euros por kilómetro.

Por su parte, Román ha denunciado que Extremadura es la única comunidad de España donde los empleados públicos aún no han recibido la subida salarial prometida. "Es una discriminación que no podemos seguir tolerando y agradecemos que la Junta esté dispuesta a reconocer esta deuda, pero es hora de que las palabras se conviertan en hechos".

La protesta no solo ha tenido como objetivo el abono de la deuda, que según las estimaciones de la consejera de Administraciones Públicas y Hacienda asciende a 25,1 millones de euros, sino también asegurar que en los presupuestos generales de 2025 se incluyan las partidas necesarias para solucionar esta situación.

Cabe señalar que durante la concentración, la Junta se ha acercado a los manifestantes, mostrando su predisposición al diálogo y asegurando que llevarán el asunto a la Mesa General de Negociación. Sin embargo, los empleados públicos no quieren más promesas. "De momento no hay fecha para esa mesa de negociación, pero seguimos esperando que estas buenas intenciones se materialicen", ha recalcado Román.

Ante esto, los trabajadores han dejado claro que si sus demandas no son atendidas, seguirán saliendo a las calles para defender sus derechos.