Extremadura dotará a más de 200 farmacias rurales de desfibriladores automáticos

Es una iniciativa pionera en España que mejorará la respuesta ante emergencias cardiovasculares en municipios con menos de 1.000 habitantes

Redacción COPE Extremadura

Mérida - Publicado el

2 min lectura

      
      
             
      

La Junta de Extremadura, en colaboración con los colegios de farmacéuticos de Cáceres y Badajoz, ha puesto en marcha un ambicioso programa de cardioprotección que dotará a más de 200 farmacias rurales de desfibriladores automáticos. Esta iniciativa pionera en España tiene como objetivo mejorar la respuesta ante emergencias cardiovasculares en municipios con menos de 1.000 habitantes, donde el acceso a servicios médicos puede ser limitado.

El proyecto, que cuenta con una inversión de 500.000 euros, busca salvar vidas mediante una rápida intervención en casos de parada cardíaca, una situación en la que cada minuto es crucial. Según explicó la presidenta de la Junta, María Guardiola, durante la presentación en la farmacia de Aljucén, “cada minuto que una persona está sin ser reanimada, su supervivencia disminuye un 10%. Con este programa, garantizamos que haya puntos de cardioprotección en nuestros pequeños municipios, conectados directamente con el 112".

Uno de los aspectos más destacados del programa es que los desfibriladores estarán disponibles las 24 horas del día. Además, al abrir la cabina que los contiene, se activará una llamada automática al 112, de modo que el personal del centro de emergencias podrá guiar a cualquier persona, esté o no formada, en el uso del aparato. Estos desfibriladores son automáticos y detectan si hay una fibrilación ventricular, lo que les permite decidir de forma autónoma si se debe aplicar una descarga.

Los colegios de farmacéuticos de Cáceres y Badajoz no solo serán responsables del mantenimiento de los dispositivos, sino también de la formación del personal de las farmacias rurales y de dos o tres referentes locales en cada comunidad. Esta formación paralela a la instalación de los equipos pretende asegurar que siempre haya personas capacitadas para actuar en una situación de emergencia.

Guardiola subrayó que este proyecto convierte a Extremadura en la primera comunidad autónoma en desplegar una red integral de desfibriladores en farmacias rurales. Aunque algunos de estos dispositivos ya existían en farmacias puntuales, es la primera vez que se ejecuta un plan tan amplio y sistemático.

Este avance es clave para mejorar la respuesta inmediata en situaciones críticas en áreas rurales, donde la lejanía de los hospitales puede reducir las posibilidades de supervivencia en caso de parada cardíaca.

      
             
      

El programa deberá estar completamente operativo antes del 15 de diciembre, según confirmaron los responsables del proyecto. Extremadura, una vez más, apuesta por la salud pública y la protección de sus ciudadanos, sin importar lo remotas que sean las zonas en las que vivan.