Operador nuclear: "Cerrar Almaraz es un error histórico: aumentará el precio de la luz y las emisiones de CO₂”

Alfredo García advierte de las graves consecuencias del cierre de la central de Almaraz

Miriam Bañón

Mérida - Publicado el - Actualizado

2 min lectura

      
      
             
      

La Central Nuclear de Almaraz, operativa desde 1983 y responsable de cerca del 7% del suministro eléctrico nacional, se encuentra en el centro de un acalorado debate. El plan del Gobierno Central de cerrar todas las nucleares antes de 2030, como parte de su transición hacia energías renovables, ha encendido las alarmas en Extremadura, donde esta planta es un pilar clave de la economía y la soberanía energética.

Este sábado, se espera que más de 15.000 personas participen en una masiva manifestación frente a la central, para exigir su continuidad. Entre los defensores de Almaraz destaca Alfredo García, ingeniero nuclear y reconocido divulgador, quien advierte de las consecuencias irreversibles de un cierre prematuro.

“Cerrar Almaraz provocará un aumento del precio de la electricidad para empresas y familias, además de un incremento de las emisiones de dióxido de carbono. Esto ya lo hemos vivido en otros países, donde las nucleares se han sustituido por ciclos combinados de gas natural”, explicó García.

El experto destacó que la energía nuclear de Almaraz tiene una ventaja clave frente a las renovables: su capacidad de producir electricidad de forma constante, sin depender de factores como el clima o la hora del día. “Esa producción constante no se puede sustituir por renovables. Solo en momentos puntuales podrían cubrirlo, y el resto del tiempo dependeríamos del gas, lo que dispararía las emisiones y los precios, como ocurrió tras la invasión rusa de Ucrania”, señaló.

Por si fuera poco, García subrayó la contradicción del gobierno en relación con la seguridad de la central: “Almaraz está considerada una de las centrales más seguras del mundo. Si el gobierno la cerrara por inseguridad, debería hacerlo de inmediato, pero no lo hace porque sabe que no es cierto. Esta planta está perfectamente preparada para operar a largo plazo”, aseguró.

El ingeniero también recordó que en otros países, como Estados Unidos, las plantas gemelas de Almaraz, ya tienen licencias para operar hasta los 80 años. “España va en dirección contraria al resto del mundo. Países como Francia, Estados Unidos e incluso Japón están apostando por alargar la vida útil de sus nucleares tras realizar revisiones de seguridad exhaustivas”, añadió.

      
             
      

La movilización de este sábado no es solo una cuestión regional. “Las centrales nucleares son un buen vecino. La gente que vive cerca de ellas quiere que sigan operando, porque generan riqueza, estabilidad y seguridad. Estoy convencido de que si hiciéramos un referéndum en la zona de Almaraz, el apoyo sería unánime”, afirmó García, quien también estará presente en la manifestación para dar visibilidad a este reclamo.

Se han puesto autobuses gratuitos desde ciudades como Madrid para facilitar la participación. Extremadura se prepara para enviar un mensaje contundente al Gobierno: cerrar Almaraz no solo afectará a la región, sino también al futuro energético de todo el país.