"Todos somos Belén": clamor en Extremadura por el asesinato de la educadora social
Cientos de personas exigen justicia y mejores condiciones en el sector tras la muerte de Belén Cortés en Badajoz
Mérida - Publicado el
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Cerca de 600 personas se han concentrado este viernes frente a la Consejería de Servicios Sociales de Mérida para exigir justicia tras el asesinato de Belén Cortés, la educadora social que fue presuntamente asesinada por tres menores en el centro donde trabajaba en Badajoz.
Al grito de "¡Basta ya, es por Belén!", manifestantes, sindicatos y profesionales del sector han pedido responsabilidades y han denunciado las condiciones precarias en las que se desempeña su labor. Las pancartas con el lema "Todos somos Belén" han inundado la protesta, reflejando la indignación y el dolor de quienes trabajan en este ámbito.
"Un accidente laboral evitable"
Desde Comisiones Obreras, su secretaria general en Extremadura, Encarna Chacón, ha sido tajante al señalar que lo ocurrido no es un hecho aislado, sino el resultado de la falta de recursos y de una gestión deficiente de los centros de menores:
"Esto que ha ocurrido en Extremadura es un accidente laboral y ha llegado a sus máximas consecuencias, con la muerte de la trabajadora. Esta situación puede evitarse"
Secretaria general de CCOO
En la misma línea, Lourdes Núñez, secretaria general de la Federación de Enseñanza y Servicios Socioeducativos, ha denunciado la falta de protocolos y la precariedad del sistema:
"Este asesinato podía haber sido perfectamente evitable si se hubiesen licitado en condiciones adecuadas, si se hubiesen evaluado a los menores en condiciones adecuadas"
secretaria general de la Federación de Enseñanza y Servicios Socioeducativos
Más movilizaciones el 22 de marzo en Badajoz
La concentración de Mérida ha sido solo el comienzo. Los sindicatos han anunciado nuevas protestas el próximo 22 de marzo en Badajoz, ciudad donde ocurrieron los hechos, para seguir reclamando cambios en el sistema de protección de menores y exigir que este caso no caiga en el olvido.
El mensaje de los manifestantes es claro: la tragedia de Belén Cortés no puede repetirse.