Marcos tiene parálisis cerebral y le pide a la alcaldesa de A Coruña “que ponga mejor las aceras”

Paraguas de bolsillo o familiares. De publicidad o artesanos. De colores lisos o estampados. Una diversidad de protecciones con un mismo mensaje: la inclusión real de las personas con discapacidad. Y, debajo de ellos, las personas protagonistas, igual de diversas. Con síndrome de Down, ceguera, daño cerebral u otro tipo de discapacidades invisibles como enfermedades mentales o autismo. 

Todos, equipados con una protección contra la lluvia más que necesaria, se han unido por noveno año consecutivo en Baixo o Mesmo Paraugas. Es una jornada festiva pero también reivindicativa.

La petición de Marcos a las autoridades

Entre los que no se pierde la cita está Marcos. Tiene 24 años y parálisis cerebral. Lleva a su perro Copito en brazos y acude cada día a Aspace, la asociación de personas con parálisis cerebral en Sada (A Coruña). Además de hacer radio o “vídeos en Youtube” en la asociación, tiene claro uno de los mensajes para este 3 de diciembre:

- ¿Qué le pides a la alcaldesa?

- “Que ponga mejor las aceras, y todo!

- Porque cuesta, a veces, ¿no?

- ¡Sí! Y con la eléctrica más

Para que no se moje la silla de Marcos, el paraguas lo sujeta su madre, Cristina. Ella se dedica en cuerpo y alma a su hijo y Aspace es para ella “una ayuda muy grande”, sobre todo porque Marcos “está contentísimo, encantado” de ir. No trabaja y sobreviven gracias a la pensión del chaval.

Celia viene con “la niña”

Un caso similar es el de Celia. Viene a la concentración con “la niña”. Se refiere así a su hija, que va a cumplir 47 años en enero.

Celia tiene 81 años aunque, por su aspecto, es imposible imaginarlo. Que su hija pasase a vivir en la residencia Aspace, para ella, supuso un antes y un después en afrontar la realidad del día a día de cuidados que, con el paso del tiempo, se hacen más cuesta arriba. “La vida fue dura hasta que entró en Aspace. Después, ya me fue más fácil todo”, confiesa

Un mundo sin barreras

Ambas madres aprovechan el micrófono para hacerse eco de algunas de las cuestiones pendientes que quedan para personas como sus hijos. “Ayudas de andar por la calle... de todo. Ayudas en todos los sentidos”, resume Cristina. “Tiene faltas de muchas cosas, muchos problemas, muchos sitios que vamos y no hay servicios para ellos”, recuerda Celia.

Y estas dos cuestiones son solo la punta del iceberg. Las peticiones de Marcos, Cristina o Celia se recogieron en el manifiesto que leyeron en el escenario. “Debemos fomentar unha visión positiva e realista da discapacidade. Reclamamos a inclusión laboral e educativa, con apoios xustos e razoables para todos. Demandamos un apoio integral e real ás familias e persoas coidadoras. Aínda na actualidade existen barreiras físicas e cognitivas. Por iso, esiximos que se cumpra a normativa de accesibilidade en todos os espazos, públicos e privados”. Ese resumen lo leía, en concreto, Daniel, uno de los intervinientes.

Galicia es la comunidad española con mayor tasa de discapacidad, 20 puntos por encima de la media. El acto de hoy reunió en distintas ciudades de la región cien entidades que representan a más de 50.000 personas, entre las que tienen discapacidad, sus familias y las propias organizaciones