Varios heridos en un enfrentamiento entre okupas y policías frente a la Insumisa

Poco le duró al gobierno local la satisfacción de un desalojo pacífico de la Comandancia de Obras. Y es que, al mismo tiempo el que el Ayuntamiento de A Coruña publicaba en redes que recuperaba las instalaciones, se producía una carga policial frente a ese mismo lugar.

Agentes del 092 evitaron, en torno a las 13:30, que entrasen decenas de personas que en esos momentos se concentraban contra el desalojo del CSO A Insumisa. El resultado: en torno a una decena de atendidos, entre ellos dos policías heridos. Hubo al menos cuatro traslados en ambulancia al hospital, uno de ellos de uno de los agentes, además de atenciones sobre el terreno por contusiones o por irritaciones provocadas por el uso de gas pimienta.

Minutos antes, mientras se producía una concentración, dos chicas conseguían acceder a las instalaciones y permanecen encaramadas a uno de los tejados de las naves. Los intentos de la policía de que bajasen no han tenido éxito

A primera hora de hoy, agentes del 092 entraron en las instalaciones de A Maestranza y, al comprobar que no había nadie dentro, tomaron posesión del espacio. Dese entonces, custodiaban la entrada para impedir el acceso. Poco a poco fueron llegando okupas y se pasó de una concentración silenciosa a un intento de entrada a las naves con carga policial.

00:00

Volumen

Comparte en:

Copiar enlace Descargar

Gritos de la concentración contra el desalojo de la Insumisa

-

Recuperación y conflicto con los plazos

Con este proceso, el Ayuntamiento alega que recupera para el patrimonio municipal el antiguo recinto militar de la Comandancia de Obras. Desde el colectivo okupa anuncian que recurrirán el proceso, al entender que el plazo para el desalojo voluntario expiraba mañana jueves, 10 días después, sin contar festivos, de su publicación en el BOE.

El representante legal de A Insumisa habla de irregularidades e incluso de un posible delito de “prevaricación”, es decir: que el concello ejecuta una resolución injusta a sabiendas.

00:00

Volumen

Comparte en:

Copiar enlace Descargar

Representante legal del CSO A Insumisa

-

Ayer mismo era la concejala de Seguridad, Rocío Fraga la que señalaba este jueves como la fecha límite para que los okupas abandonasen el recinto. Hoy, cambiaba el discurso y aseguraba que ese plazo terminó el 27 de abril, tal y como refrenda, indicaba, la asesoría jurídica municipal. Según Fraga, lo publicado en el BOE eran información “de carácter complementario”.

En una comparecencia en la que estaban, como público, los concejales de Rehabilitación y Participación, entre otros asesores de la Marea, hablaba de ”la mejor de las formas” de desocupar el espacio:

00:00

Volumen

Comparte en:

Copiar enlace Descargar

Rocío Fraga, sobre la Comandancia de Obras

-

Según Fraga, las obras de rehabilitación, que acometerá Fomento, se iniciarán “de inmediato”, en cuanto lo ordene el área municipal de Rexeneración. Esta misma mañana técnicos del Ayuntamiento supervisaron las instalaciones, antes del enfrentamiento entre policías y okupas. Todavía no se sabe si han variado los planes municipales tras los incidentes.  

De un edificio militar a las Naves do Metrosidero

La comandancia de obras, antiguo recinto militar, permanecía okupada desde noviembre de 2016. Fue reconvertida en el CSO a Insumisa, un Centro Social autogestionado en el que se desarrollaban conciertos, fiestas, charlas o actividades como baile y boxeo. Los ocupantes realizaron obras en las instalaciones e incluso instalaron una pista de skate, que fue retirada en los últimos días con ayuda de la policía local.

Cuando el ministerio de Fomento anunció la licitación de las obras de rehabilitación de este bien, el Ayuntamiento planteó para el lugar la creación de las 'Naves do Metrosidero', un centro orientado a la juventud con actividades muy parecidas a las que hasta ahora se desarrollaban en la Insumisa. Miembros del ejecutivo coruñés tendieron la mano en varias ocasiones a los okupas para que formasen parte de este proyecto de sus actividades, ya legalmente, a cambio de desalojar. El colectivo rechazó en varias ocasiones ese ofrecimiento.