La Xunta será propietaria de parte de la fachada marítima de A Coruña

La Xunta de Galicia comprará el 51% de los terrenos portuarios de Batería y Calvo Sotelo para blindar su titularidad pública. Será con una inversión máxima de 20 millones de euros. Así lo recoge el protocolo firmado hoy entre el presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo y el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, con el que el gobierno autonómico también se reserva el derecho de adquirir parte del muelle de San Diego cuando se desafecte en 2027. En el documento se recoge, además, que la parcela de La Solana no pasará a manos privadas. 

El acuerdo contempla que Puertos del Estado y ADIF financien íntegramente el tren entre el puerto interior y Punta Langosteira, con lo que se libera de carga presupuestaria a la Autoridad Portuaria coruñesa. El proyecto se prevé licitar en la primera mitad de 2019 con una inversión de unos 140 millones de euros. 

Se trata de un protocolo que "no es usual en el sistema portuario español", según el ministro Íñigo de la Serna: "nunca una comunidad autónoma ha decidido hacer una aportación dineraria importante para garantizar la titularidad pública de un espacio que hoy es portuario", ha dicho el titular de Fomento.

El documento firmado hoy tendrá que desarrollarse en un nuevo convenio posterior, al que Núñez Feijóo invita a sumarse al Ayuntamiento y a la Diputación. Insta a los gobiernos local y provincial a poner dinero sobre la mesa si quieren garantizar la titularidad pública para el 49% de Calvo Sotelo y Batería que quedará en manos del puerto coruñés. Mantiene que la responsabilidad sobre esta cuestión era, en primera instancia, competencia de Fomento y de la Xunta. El presidente de la Xunta ha defendido la "política de hechos" frente a la de "soflamas" ante un acuerdo que, entiende, supone "una buena solución para el futuro". Considera Feijóo que es la "solución que nos ha pedido el Ayuntamiento de A Coruña en sus resoluciones y sus mociones"

Del otro lado, el alcalde de A Coruña, Xulio Ferreiro, se ha quejado de falta de respeto institucional y rechaza que inviten al gobierno coruñés a  "unha cuestión xa cociñada". "Empezamos mal o ofrecemento", ha señalado Ferreiro, que cuestiona, por ejemplo, que el consistorio no haya podido opinar sobre los porcentajes de distribución de la compra de muelles.