Las clínicas cerraron este martes para protestar contra la ley del medicamento veterinario

Buena parte de las clínicas veterinarias de todo el país secundaron en la mañana de este martes un paro en protesta por el Real Decreto 666/2023, que regula la distribución, prescripción, dispensación y uso de medicamentos veterinarios, sobre todo los antibióticos.

La movilización consistió en un cierre simbólico de una hora, de 11,00 a 12,00 horas, para manifestar su rechazo a esta normativa y a otras medidas que, según los profesionales, dificultan su labor y ponen en riesgo la salud de las mascotas.

Una de las clínicas veterinarias que secundó este paro fue la Clínica Veterinaria Cantón, en Ferrol, a cuyo frente está el veterinario Francisco Javier Breijo, conocido como 'Canco'.

Asegura que el colectivo está en contra de la nueva ley del medicamento impuesta a través de la una aplicación, de nombre ‘Presvet’.

Asegura Breijo que con esta nueva norma no les dejan aplicar su criterio a la hora de hacer los tratamientos y que "estemos condicionados, ya que la Ley europea del medicamento, no busca los mismos argumentos que se nos quiere aplicar desde el Gobierno central.

Los veterinarios también critican la implantación del nuevo sistema informático de control de prescripciones de antibióticos, el ‘Presvet’, que además les obliga a perder tiempo en su utilización y que, en ocasiones, no funciona.

Además, Francisco Javier Breijo, asegura que ahora se les obliga a utilizar antibióticos menos eficaces como primera opción, y que, en ocasiones, “tenemos que recurrir a otro para corregir, como ocurre con algunas infecciones”, lo que supone un mayor gasto para el cliente.

Dice 'Canco', que los veterinarios lo que quieren es que se les deje trabajar según su criterio y según su propia experiencia, ya que ellos lo que siempre buscan lo mejor para los animales y mascotas que tratan.

Las sanciones por incumplir los preceptos de este Real decreto son desproporcionadas, y pueden llegar hasta un millón doscientos mil euros de multa.

Eso sí, el IVA sigue siendo del 21%, lo que consideran estos profesionales de la sanidad animal un obstáculo, ya que somos el país de Europa que tiene el IVA de lo más alto.