Personal de Maitours, del grupo Alsa, llevas sus protesta a las estaciones de autobuses de A Coruña y Pontevedra

Trabajadores del transporte de viajeros por carretera se concentraron este jueves en las estaciones de autobuses de A Coruña y Pontevedra en solidaridad con los compañeros de Maitours, que están en huelga desde el 15 de julio, para reclamar a la empresa que se les aplique el convenio colectivo sectorial, que se compensen los festivos trabajados y que se cumpla con el acuerdo para la realización de los servicios imprevistos.

Esta protesta fue acordada la pasada semana durante una asamblea de delegados de la CIG en el sector ante lo enquistamiento del conflicto en Maitours, por la negativa rotunda de la empresa a negociar y la falta de mediación de la Xunta, a pesar de ser responsable del contrato.

Según el responsable de Transportes de la FGAMT-CIG, Xesús Pastoriza, la única intervención de la administración gallega fue para triplicar los servicios mínimos coincidiendo con el inicio del curso escolar.

"Le pedimos a laXunta que apareciera para intentar solucionar el conflicto y lo que hizo fue aparecer para colocarse del lado de la patronal e intentar reventar la huelga”.

CONVENIO

Maitours, junto con Intercar, forma la UTE que tiene adjudicado el servicio de transporte urbano e interurbano en la comarca de Ferrol. Ambas empresas pertenecen al Grupo Alsa pero mientras que el personal de Maitours continúa regulado por el convenio colectivo de la extinta Tranvías de Ferrol, al personal de Intercar, y del resto del sector en la provincia, se le aplica el convenio del transporte de viajeros por carretera de A Coruña.

Esto constituye un claro perjuicio para los trabajadores de Maitours que, realizando el mismo trabajo, tienen condiciones salariales y laborales inferiores, no se les aplican las subidas pactadas en convenio y no tienen reconocidos derechos como el cobro de las dietas o la antigüedad.

De tal manera, subraya Pastoriza, que un trabajador de Maitours con 18 años de antigüedad "está cobrando alrededor de unos 1.200 euros brutos, lo que provoca una diferencia de entre 400 y 600 euros con el resto del personal a lo que se le aplica el convenio provincial".