El sindicato CGT acusa a la dirección de Navantia de amenazarlos con restringirles el uso del correo

El secretario de la Sección sindical de la CGT en Navantia Ferrol, Xaquín García Sinde, ha asegurado que la dirección de la empresa naval pública ha amenazado a esta organización con “restringirnos el uso del correo electrónico”, y más en concreto, “el uso de lo que se llaman las listas corporativas, que permite enviar a toda la factoría un correo como si se enviase un solo correo a una persona”, detallando que “esas listas las tienen todos los sindicatos a nivel de todo el grupo”.

Dichas manifestaciones las ha realizado García Sinde en la mañana de este jueves, 11 de mayo, a las puertas del astillero de Ferrol, en donde ha estado acompañado por otros delegados.

Así, el representante sindical ha detallado que “la primera amenaza la recibimos el 14 de abril, diciendo que enviáramos un correo con contenido no laboral ni relacionado con nuestras funciones como representantes de los trabajadores de Navantia”, manifestando que este tenía que ver con “una concentración contra las reformas a las pensiones, y que te digan desde una empresa que una concentración contra reformas a las pensiones es contenido no laboral, pues nos parece un poco de chiste y tampoco le prestamos mayor atención”.

Posteriormente, según Sinde, “el día 26 de abril recibimos una segunda amenaza donde insisten en lo mismo, añadiendo además una difusión de convocatorias de manifestaciones de los trabajadores de Lidl, o una concentración en solidaridad con las huelgas en Francia, nos acusan de que esos correos solo buscan favorecer los intereses particulares de la CGT”.

BOLETÍN

García Sinde ha criticado que desde la dirección de Navantia se critique sus boletines informativos semanales, “al que la empresa califica de panfleto, el mismo término que utilizaba la dictadura contra las publicaciones contrarias al régimen, ya que aseguran que es una hoja de descalificaciones personales”, lo que ha valido para asegurar que esta actitud de la empresa “es surrealista y esperpéntico” y estiman ue esta actitud busca “limitarnos en nuestras funciones como representantes sindicales de Navantia, porque los problemas de los trabajadores de Navantia no finalizan en estas murallas”.

Por último, García Sinde ha manifestado que esta situación puede ser causa a que “a Navantia no le gusta el modelo sindical de la CGT, quieren un sindicalismo corporativo e incluso quieren ir más allá, les encantaría una individualización de las relaciones laborales y que quieren el oscurantismo y que los trabajadores tengan la menor información posible”.