Concheiros: calle levantada, desvíos de transporte y vecinos temerosos por los plazos

La Calle Concheiros, en Santiago, sigue en obras. El plazo oficial para que terminen será septiembre de 2021, pero muchos vecinos no lo ven posible

Redacción COPE Santiago

Santiago - Publicado el - Actualizado

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La calle de Concheiros, en Santiago, estaba muy necesitada de obras de mejora: servicios, aceras y la carretera de adoquín llevaban en boca de vecinos y comerciantes desde hacía tiempo. Además, se trata de una zona de paso para miles de peregrinos que año tras año completa la ruta.

Con la intención de ganar en funcionalidad y estética, las obras en Concheiros arrancaban en noviembre de 2020. El alcalde Sánchez Bugallo decía entonces que, a pesar de lo apretados de los plazos, su intención es que para el verano pudiesen estar rematados los trabajos. 2021 no es un año cualquiera para la ciudad del Apóstol: es Año Santo y se esperaba un aluvión de visitantes, de ahí la premura.

Es verdad que la pandemia ha enfriado las expectativas de momento en cuanto a llegada de peregrinos, pero las obras deberían continuar por el bien de los vecinos y comerciantes que sufren las molestias.

Esa era la intención, con todo, llegaron los imprevistos: a finales de año se detactaba una línea de media tensión que no aparecía en los planos, lo que obligó a hacer reprogramaciones y ajustes. El Concello de Santiago tuvo que dar un nuevo plazo para el fin de los trabajos: finales de septiembre de 2021, ya no estarán para los meses fuertes de verano.

De una punta a la otra, el lado de los números impares en Concheiros tiene zanja más o menos abierta, mientras que en el de los pares, está acumulado el material de obra. Por el medio circulan desde este lunes, 19 de abril ya solo turismos y vehículos de suministros, los buses ya no. El concejal de obras de Compostela, Javier Fernández, aseguró en una reunión el sábado en el barrio que en septiembre la cosa estará lista. Pero en la calle hay dudas.

VECINOS Y COMERCIANTES TEMEN QUE NO SE CUMPLAN LOS PLAZOS PREVISTOS

Los vecinos y comerciantes de Concheiros muestran su temor por lo ajustado del calendario. Se temen que ni para el comienzo del otoño pueda estar terminada la remodelación.

Denuncian la vuelta que tienen que dar ahora mismo en coche para poder acceder a sus viviendas o, sobre todo padres, lamentan no poder disponer de plazas para estacionar más cerca de sus domicilios, pensando en llevar a los críos al colegio o las dificultades de descargar las bolsas los días de compra.

¿Y cómo afectan las obras a los negocios? Matías tiene un establecimiento hostelero. Sí ha notado una bajada de clientela y ya no solo teme por el plazo, sino por cómo será el resultado final: si se quitan todas las plazas de aparcamiento, o la mayoría, ¿qué pasará con los clientes que hacían una parada rápida para tomarse algo y seguir el trayecto? Cree que saldrá perdiendo.

Algún comercio ha echado el cierre y los que siguen con su actividad acusan esa bajada de la facturación: hasta un 30% menos de clientela, estiman desde una tienda de productos ecológicos.

También nos hemos encontrado residentes, como Carmen, que nos contestan con resignación: hay que sufrir las obras para ganar en calidad de vida después.

¿CÓMO QUEDARÁ CONCHEIROS, UNA VEZ TERMINADAS LAS OBRAS?

La idea es ganar espacio para el peatón, además de renovar servicios básicos y despedir definitivamente los adoquines de la carretera. El plan final contempla eliminar dos tercios de las plazas de estacionamiento de la calle. Para intentar compensar la pérdida de huecos para aparcar, el Ayuntamiento anuncia que acondicionará la parcela de Triacastela, para que los residentes puedan contar con este espacio.

También la parcela de Altiboia se ha acondicionado en la zona de Rodríguez de Viguri. Con todo, ¿será suficiente?

Aparcamiento en Triacastela, de momento sin acondicionar

Aparcamiento en Triacastela, de momento sin acondicionar