Más de 500 hectáreas quemadas en Galicia en dos días de incendios

Galicia vive desde este miércoles la peor ola de incendios del verano. El tiempo seco y los vientos fuertes del Noreste deja un reguero de fuegos que están poniendo a prueba la eficacia del sistema de extinción de la Xunta.

El más importante por el momento ha sido el de Monforte, en la provincia de Lugo, que se iniciaba el mediodía de este jueves en la parroquia de Seoane y que rápidamente avanzaba hasta afectar a unas 350 hectáreas. Los vecinos de dos aldeas- Vide y Mañente- tuvieron que ser desalojados por precaución y varias carteras tuvieron que ser cortadas. No fue hasta la medianoche cuando se dio por estabilizado el fuego.

Algo más hacia el Sur, en Ourense, hace ya varios días que luchan contra las llamas. Está controlado ya el incendio de Cenlle, que afectó al parque natural del Xurés, pero sigue preocupando el de Lobeira, que si bien se daba por estabilizado a mediodía las fuertes rachas de viento que afectaron a la zona a última hora de la tarde consiguieron avivarlo.

También en Porto do Son, en la costa de A Coruña, la jornada del jueves fue de muchos nervios, con un fuego que se había iniciado en la parroquia de Miñortos avanzando por la zona alta del municipio y llevando de humo localidades como Portosín. Este incendio se acerca a las 90 hectáreas de monte quemado, y se produce, además, en una comarca especialmente castigada por el fuego.

INTENCIONADOS

En la comarca del Barbanza se registraron la madrugada del miércoles al jueves hasta ocho incendios forestales, lo que hace pensar que estamos ante una ola de fuegos claramente provocada.

Precisamente el presidente de la Xunta lamentaba este jueves la "actitud desaprensiva de algunos ciudadanos que nos quieren quemar los montes", y recordaba e número de teléfono 085, operativo para avisar de la presencia de fuegos en la comunidad.