La víctima del Chicle en Boiro: "Sabía que si le entregaba el móvil mi vida corría peligro"

Sigue en los juzgados de Fontiñas, en Santiago, el juicio por el intento de rapto de una chica en Boiro (A Coruña) que se le atribuye a Enrique Abuín, el acusado también del crimen de Diana Quer, que hoy se sienta en el banquillo.

La joven explicó en su declaración que el Chicle intentó introducirla violentamente en el maletero del coche aquella tarde del 25 de diciembre de 2017 y que tenía claro que si le entregaba el teléfono móvil, como él le pedía, su vida iba a correr peligro.

El juzgado le ha permitido declarar oculta tras un biombo y ha a tomado medidas para mantener en secreto su identidad. Desde que sufrió el ataque padece secuelas psicológicas.

Como principal prueba de los hechos la acusación aporta una grabación hecha sin querer con el teléfono en la que se escucha como el acusado, en un tono amenazador, le exige el teléfono y le pide que se meta en el coche.

Afortunadamente dos chicos oyeron los gritos de auxilio y acudieron al rescate. El Chicle pudo escapar en ese momento pero acabó pronto detenido. Ese arresto posibilitaría, posteriormente, resolver el caso de Diana Quer, por el que va a tener que sentarse en el banquillo de nuevo antes de que termine este año.

DECLARACIÓN DE ABUÍN

En su declaración Abuín negó haber intentado secuestrar a la víctima y afirmó que "sólo quería robarle el móvil". "No me quiso dar el móvil y forcejeamos".

La fiscalía pide para él casi 16 años de prisión. Por el crimen de Diana Quer tanto el ministerio fiscal como la acusación particular reclaman prisión permanente revisable.