CANDIDATOS 26-M
Bugallo asegura que se quedará en Raxoi aunque no consiga ser alcalde
Rechaza un pacto para marcharse y dejar a Mercedes Rosón como nº 2 de Noriega
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Xosé Sánchez Bugallo quiere volver a la corporación compostelana para gobernar. El socialista asegura que siempre dio por cerrada esa etapa de su vida, pero que se planteó el regreso porque le dolía ver el estado de la ciudad y lo ocurrido en los años de gobierno popular. El candidato socialista se ve "bien o muy bien" en esta campaña. La cosa va a estar muy ajustada, nos reconoce el aspirante, pero sigue pensando que en el particular pulso de la izquierda, los socialistas saldrán victoriosos.
"El 58% de los que votaron a Compostela Aberta están decepcionados". El porcentaje y el dato nos lo aporta el ex regidor que entiende que Noriega bate el récord de desilusionados con su gobierno. A esa bolsa de descontentos se dirige constantemente Bugallo. Apela al cariño por Santiago y es que cree el ex alcalde que nuestra ciudad perdió 3 años y medio, solo ahora, en la recta final del mandato, ve a Noriega centrado.
Sánchez Bugallo es una persona conocida, para lo bueno y para lo malo. En esta campaña ha vivido momentos desagradables, él confiesa que: "No se puede hacer tortilla sin romper huevos", pero, a renglón seguido mantiene que nunca tomó decisiones desde la Alcaldía para hacerle mal a nadie.
¿Qué nota le da al candidato de CA? Más que un suspenso: un deficiente. Noriega no llega al 3, le da un 2,5. Hay cuestiones que Bugallo valora positivamente como en festejos populares o en la campaña En Negro contra la violencia machista, pero hay otras en las que le da "un cero patatero", como por ejemplo gestión de servicios públicos, transporte o en proyecto de ciudad.
Reconoce que, tras su marcha hace 8 años, el PSOE quedó muy dividido, incluso enfrentado y no supo construir una alternativa: "Aquello fue un desastre".
Sobre sus prioridades, ve fundamental la puesta a punto para el Xacobeo 2021: "No hay nada hecho y estamos a 18 meses de la cita". Se compromete a crear una comisión de trabajo "no en los primeros cien días, sino en la primera semana".
¿Y si pierde? Si no logra ser la lista de la izquierda más votada insiste: "Yo solo quiero ser alcalde de Santiago, si no lo consigo mi compromiso es por 4 años". Asegura que se quedará y que "el día que termine en el Concello, el camino que me queda es el camino a mi casa".
También reconoce que si su presencia se convierte en un obstáculo para la ciudad, se marchará antes de terminar la legislatura. La pregunta, entonces, era obligada. ¿Se irá para que su número dos pacte con Noriega? "Sería muy contrario a mí que el PSOE aceptase ser el número dos de Noriega".
PORRA
El candidato socialista nos hace su particular porra. Le gustaría sacar 13, la mayoría absoluta, pero siendo realistas cree que ahora mismo el PSOE conseguiría 8 concejales, PP: 7, CA: 7, BNG: 2, C's: 1.
FICHA DEL CANDIDATO
*Nombre: Xosé Antonio
*Apellidos: Sánchez Bugallo
*Edad: 65 años
*Lugar de nacimiento: Teixeiro (Curtis - A Coruña)
*Estudios: Económicas (no completó la licenciatura)
*Trabajó en diversos lugares antes de dedicarse en exclusiva a la política, el último, en Autopistas del Atlántico
*Cargos políticos: Concejal en el ayuntamiento de Santiago desde 1987, en 1999 fue elegido alcalde y encabezó tres gobiernos consecutivos de coalición con el BNG. Perdió la alcaldía en 2011 y fue elegido diputado en el Parlamento gallego, cargo que ocupó hasta octubre de 2016.
*Estado civil: Divorciado
*Hijos: Una hija
*Aficiones: caminar, leer e ir al cine.
Nacido en una población a unos 60 kilómetros de Santiago, al candidato socialista le gusta subrayar que lleva vinculado a la capital gallega desde muy joven: se trasladó aquí para estudiar y su vida política está íntegramente vinculada a Compostela. En 1983 entró por primera vez en el Pazo de Raxoi (el ayuntamiento de Santiago) como jefe de gabinete del socialista Xerardo Estévez... y ya fue para quedarse una buena temporada.
Asumió en sucesivos gobiernos las competencias de tráfico, seguridad ciudadana, portavocía, hacienda, transportes...así que a nadie extrañó que cuando Estévez dió un paso atrás en 1999 para volver a su estudio de arquitectura, Sánchez Bugallo le tomase el relevo en el cartel electoral.
Encabezó tres gobiernos consecutivos de coalición con el Bloque Nacionalista Galego. En una corporación de 25 representantes, en las elecciones de 1999 los socialistas obtuvieron el 33,24% de los sufragios y 9 concejales. En 2003, subieron al 40,02% y a 11 concejales pero en 2007 volvían a retroceder al 37,88% y a 10 representantes.
Sánchez Bugallo abandonó el ayuntamiento de Santiago después de que el Partido Popular consiguiese mayoría absoluta en 2011: fueron 25 años de dedicación a la política local de los que asegura “no se arrepiente, a pesar de lo absorbente que puede llegar a ser y todas las renuncias personales que implica... en general he sido muy feliz”, aseguraba a Cope recientemente.
Jubilado en 2017, el partido volvió a apostar por él aunque hubo otro aspirante inicialmente a las primarias locales, que no llegaron a celebrarse al sumarse ambas candidaturas. Sánchez Bugallo vuelve, dice, dispuesto a “dar de nuevo la batalla por su ciudad” porque asegura que “le duele” ver como la han dejado los ocho años de “desgobierno de PP primero y Compostela Aberta, después”. Ojo, porque no se ha pasado lo que lleva de retiro observando obras desde la barrera: presumía de hacer hasta diez kilómetros caminando algún día...así que puede que haya energía para el reestreno en mayo de “El Retorno de Bugallo”