La cabalgata de Reyes vuelve a llenar de ilusión y fantasía las calles de Santiago

La tarde de los Reyes Magos, el día 5 de enero, siempre nos deja fotografías de mucha ilusión por las caras de los más pequeños, que esperan ver a Sus Majestades de Oriente.

En Santiago la cabalgata discurrió con normalidad, sin incidencias, y con buen tiempo. Las lluvias no hicieron acto de presencia y el sol brilló para recibir a Melchor, Gaspar y Baltasar.

Como viene siendo tradicional, los Reyes Magos llegaron a la capital gallega en tren. A las 17:30 horas la comitiva real hacía su entrada a la estación de ferrocarril de Renfe y hacia la Plaza del Obradoiro, pasando por el ensanche y la zona histórica.

El recorrido fue el mismo que de años anteriores y cientos de personas se animaban a salir a la calle para ver las seis carrozas y hacerse con algún caramelo, de los más de 1.300 kilos de dulces sin gluten que se repartieron.

Hubo seis carrozas que desfilaron por las calles bajo el hilo conductor del cuento de "Cascanueces". Además, niños y mayores pudieron disfrutar de las acrobacias y la animación que acompañaba a Sus Majestades. Hubo cartas danzantes, estrellas luminosas, personajes llenos de luz e, incluso, un hada.

A su llegada a la Plaza del Obradoiro, muchísimas familias los recibieron con aplausos y sonrisas. No faltó la música de "Mamá Cabra" en la propia plaza.

De la puesta en escena de la Cabalgata se han encargado cerca de 450 persoas, entre grupos profesionales, asociaciones de vecinos y voluntarios. Participaron 26 agrupaciones artísticas con espectáculos de diferentes temáticas, muchos diseñado para la ocasión. Entres estas agrupaciones, estuvieron escuelas de danza como Mandala y Can Cun Quinqué, la Agrupación Cantigas e Agarimos, la Banda de Tambores y Cornetas y las compañías Barafunda, Bambolea, Artistalia, Eventos Culture ou Pablo Méndez, además, claro, de la banda municipal de música.