Trampas selectivas y geolocalizadas para atrapar a las reinas de avispa velutina en Galicia

Hace ahora 20 años, allá por 2004 se detectó por primera vez en Europa la presencia de la avispa asiática, más conocida por el nombre de avispa velutina, introducida en el Viejo Continente a través de un cargamento de madera a bordo de un buque que descargó en el puerto francés de Burdeos. Oculta en esa madera viajaba un ejemplar de reina de avispa velutina con huevos fecundados y que fue el origen de la expansión de esta especie invasora de insecto que en apenas dos décadas ha logrado colonizar una parte importante de territorio.

De hecho se cree que fue a través de Navarra y País Vasco como entró en la península ibérica, expandiéndose rápidamente por todo el norte y llegando hasta Galicia, donde ha encontrado una climatología perfecta para su proliferación y donde en los últimos años se ha convertido en un verdadero problema tanto medioambiental como económico y social.

Y es que el gusto de las velutinas por las abejas autóctonas y por la fruta madura ha puesto en peligro no sólo la producción apícola y hortofrutícola en Galicia, sino que ha generado un problema de seguridad por sus potentes picaduras que han herido a un número importante de personas, llegando en los casos más extremos a provocar la muerte de la víctima. Hasta una decena de casos mortales según informaciones publicadas a finales de 2023, lo que le ha acarreado a esta especie el sobrenombre de "asesina".

UNA BATALLA PLANIFICADA Y COORDINADA POR TODA GALICIA

Desde que se detectó la presencia de ejemplares de avispa velutina en Galicia, comenzó una batalla para intentar frenar su expansión y los efectos nocivos provocados, al principio casi sin medios para poder destruir los grandes nidos que construyen en verano, aunque rápidamente se constató la peligrosidad de esta medida por el ataque de los insectos, e improvisando trampas caseras a base de cualquier producto que las atrajera, aunque a riesgo de que en las trampas cayeran todo tipo de insectos, lo que provoca un daño mayor en el medioambiente que el que se quiere evitar.

Así, en los últimos años las administraciones públicas, Xunta de Galicia y Ayuntamientos se han ido dotando en primer lugar de material protector adecuado para los servicios que desde Protección Civil, Bomberos y la empresa mixta SEAGA (Servizo Agrario Galego) son los encargados de acudir a las llamadas que se reciben por el avistamiento de los grandes nidos secundarios, sólo el año pasado más de 56.000 avisos que permitieron la destrucción de más de 26.500 nidos.

Y en segundo lugar, con la base científica y técnica que han aportado en los últimos años las investigaciones sobre esta especie realizadas en las tres universidades gallegas y que están dando como resultado una estrategia planificada y coordinada en la que se están introduciendo nuevos sistemas para poder controlar la proliferación de la especie.

Entre otras, adelantar las medidas a la primavera para intentar acabar con las reinas antes de que pongan en marcha todo el ciclo reproductivo y controlar su proliferación, ya que la expansión de esta especie se da ya por completada por todo el territorio gallego tras la "brutal expansión hacia las provincias de Lugo y Ourense que se produjo el pasado año desde las provincias costeras".

GRAN INTERÉS POR EL TRAMPEO SELECTIVO Y GEOLOCALIZADO

Nos lo cuenta la directora gerente de SEAGA, Luisa Piñeiro, responsable de coordinar las acciones que se están llevando a cabo en esta lucha contra la avispa velutina con planes piloto como el nuevo sistema de trampeo que se está probando en distintos puntos de la comunidad y que "básicamente consiste en un sistema selectivo por el que queremos atrapar a las reinas con atrayentes muy específicos, evitando así perjudicar a otras especies de insectos", antes de que estas reinas puedan desarrollar los pequeños nidos primarios en primavera que en verano darán lugar a los grandes nidos secundarios del verano, "a partir de junio y julio" con miles de ejemplares en cada colonia.

Una trampeo que se realiza además en puntos geolocalizados "ya que se ha constatado que es siempre en las mismas zonas donde se produce la salida de estos ejemplares", siguiendo así un patrón de comportamiento animal que en caso de que se llegue a conocer y entender, podría suponer un paso adelante muy importante para intentar controlar la proliferación de la avispa asiática por Galicia.

De hecho, tras darse a conocer este novedoso sistema, "son muchos los ayuntamientos los que nos están llamado interesándose por él", reconoce Luisa Piñeiro, por lo que desde SEAGA y la Xunta ya se ha establecido una próxima reunión "con todos los alcaldes de Galicia" para abordar este plan coordinado y planificado con el que se quiere hacer frente a la avispa velutina en una batalla "en la que tenemos que participar todos" y en la que, al menos de momento, sigue ganando la especie invasora.