La CHMS descarta la obra en Lugo a pesar del informe ambiental favorable de la Xunta

Quiroga afirma que el es "inasumible" abordar la recuperación del azud de la Aceña de Olga a estas alturas del verano

Vista aérea del Miño a su paso por Lugo

José Luis Ramudo

Lugo - Publicado el - Actualizado

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El presidente de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil (CHMS), José Antonio Quiroga, ha confirmado que la obra para restaurar el azud de la Acea de Olga, en el río Miño, a su paso por Lugo, tampoco podrá ejecutarse este año, a pesar de haber recibido en las últimas horas informe favorable por parte de la Xunta de Galicia para el traslado de la colonia de mejillones que hay en el lugar y para rehabilitar la infraestructura.

Aunque la Xunta de Galicia asegura que ha emitido el correspondiente informe favorable a la empresa encargada de la obra, Tragsa, “antes de que terminase el plazo legalmente establecido”, Quiroga habla abiertamente de un “bloqueo” por parte de la administración autonómica, habida cuenta de que la solicitud fue presentada “en el mes de mayo”.

“No hay ningún técnico en la Confederación ni en Tragsa que respalde meterse en el río a estas alturas del mes de agosto”. Recuerda que las obras tendrían que empezar el día 7 agosto y el plazo de ejecución de las mismas es de tres meses.

AUMENTA EL CAUDAL

“Por lo tanto, asumiríamos un riesgo extremo. Ahora mismo, el caudal es de 4,40 metros cúbicos por segundo, pero en octubre ese caudal subirá”, dijo Quiroga, posiblemente a unos “19 metros cúbicos por segundo”.

“Nos metemos en otoño”, añadió, en un momento delicado también en el ciclo reproductivo de los truchas. “No es asumible”, y “es una lástima”, dijo el presidente del CHMS, porque “es una obra muy demandada”.

A su juicio, por parte de la Xunta de Galicia no hay un verdadero interés por colaborar con esta obra. De hecho, afirma que en el informe emitido se establecen unos criterios “muy rígidos, estrictos y rigurosos”.

Recordó que habría que numerar, “uno a uno”, unos “7.500 ejemplares de mejillón de río” antes de proceder a su traslado a una nueva ubicación en el cauce del Miño.