Deja su coche y se marcha en taxi tras huir de la policía en una persecución de película por Lugo

Llegó a poner el cuentakilómetros a 170 por hora, realizó giros bruscos en medio de la calzada, colisionó con varios vehículos y circuló en sentido contrario

José Luis Ramudo

Lugo - Publicado el - Actualizado

3 min lectura

La investigación desarrollada por agentes de la Policía Local de Lugo ha permitido identificar a un joven de 21 años de edad que logró huir de las patrullas que lo siguieron en el transcurso de una persecución de película por calles y carreteras próximas a la capital lucense, donde llegó a poner su coche a 170 kilómetros por hora, realizó giros bruscos en medio de la calzada, colisionó con varios vehículos y circuló en sentido contrario, sin respetar ni semáforos ni señales.

Los hechos sucedieron el pasado 19 de enero, de madrugada, cuando una patrulla del Grupo Operativo Nocturno de la Policía Local de Lugo, que prestaba servicio por la Avenida Ramón Ferreiro, observó que el vehículo que iba delante carecía de iluminación en la parte posterior, por lo que procedió a darle el "alto".

El conductor detuvo su marcha en la Praza de Bretaña. Los agentes se percataron de inmediato de que presentaba síntomas claros de haber bebido. En un momento dado, cuando estaban hablando con él, emprendió la marcha de forma brusca, aceleró a fondo y se dirigió hacía la Rúa Dinán, lo que hizo que comenzase la persecución.

Circuló a toda velocidad por Cidade de Vigo, Praza da Constitución, Ángel López Pérez y Avenida de Rodríguez Mourelo. Al llegar a la Praza de Avilés, frente a la sede de los Juzgados y la Audiencia Provincial, el vehículo chocó frontalmente contra otro coche estacionado.

Colisionó con otro coche en las inmediaciones de la Praza de Avilés

Sin embargo, esa colisión no fue suficiente para detener su marcha. Continuó su alocada huida por Pintor Corredoira, República Arxentina y Rúa Santiago, sin respetar en este recorrido ni las luces de los semáforos, ni las señales de stop.

Entonces, se metió por la Calzada da Ponte, de uso peatonal, y circuló a más de 80 kilómetros por hora, cuando la vía está limitada para los vehículos a una velocidad máxima de 20 kilómetros por hora.

A 170 kilómetros por hora

En un momento determinado, antes de incorporarse a la Nacional 6, el conductor perdió el control del coche, que se salió de la carretera, pero tampoco eso hizo que detuviese su marcha. De hecho, en la carretera, aumentó la velocidad y llegó a circular a 170 kilómetros por hora en dirección Madrid.

Se salió de la carretera, pero continuó su alocada huida

Una patrulla llegó a ponerse en paralelo con el coche del conductor huido, momento en el cual realzió una maniobra peligrosa, con desplazamiento hacia la izquierda para cortarle el paso al vehículo policial y arrinconarlo contra la mediana.

En ese momento, otra patrulla logró adelantar al vehículo huido con la intención de cortarle el paso, pero el conductor realizó un giro inesperado de 180 grados en medio de la calzada y continuó su marcha en sentido contrario por la N-VI, para continuar luego su huida por la carretera que lleva al municipio vecino de O Páramo, de nuevo a toda velocidad.

Abandonó su coche y se fue en taxi

Finalmente, la patrulla perdió de vista el vehículo, que fue posteriormente localizado, abandonado entre dos casas en el lugar de Seoane.

Este suceso dio lugar a una investigación por parte de la Policía Local que acaba de culminar con la identificación del conductor, que resultó ser un joven de 21 años, vecino de un municipio próximo a Lugo, que se negó a prestar declaración, asistido por un abogado.

Para su identificación, los agentes realizaron un visionado de las diferentes cámaras de seguridad que había en el trayecto que recorrió con su vehículo. En una de ellas, obtenida en una gasolinera, vieron como el conductor estaba esperando la llegada de un taxi, que finalmente lo recogió.

Conducción temeraria

Es investigado por "conducir un vehículo de forma temeraria, con manifiesto desprecio por la vida de los demás y negarse a someterse a las pruebas de detección alcohólica y drogas". Su vehículo fue retirado por el servicio de grúa y ha quedado depositado y precintado en el depósito municipal.

La Policía Local instruye diligencias para su remisión al Juzgado de Guardia de Lugo.