Mujeres del rural dicen en un estudio de Lence que “hay que potenciar el campo como una opción para trabajar”

Un estudio realizado por el Grupo Lence con motivo del Día de la Mujer en el Rural -que se celebra este sábado-, en el que ha participado un grupo de productoras lácteas, revela que una sus principales preocupaciones es la carencia de mano de obra, porque “la sostenibilidad del sector pasa por invertir y seguir creciendo”, pero la falta de gente que quiera trabajar en el campo “es lo que lo hace complicado”.

Según ha informado el Grupo Lence en un comunicado, “con este estudio, la compañía busca, en el marco del Día de la Mujer en el Rural, poner sobre la mesa cuestiones como cómo evitar el fenómeno de la España vaciada y visibilizar las oportunidades que ofrece el campo”.

En ese sentido, las ganaderas que han participado en ese estudio consideran que para “salvar al sector, hay que potenciar el campo como una opción para trabajar”, porque “ahora el rural se está vendiendo para las vacaciones, pero es necesario potenciarlo como espacio de trabajo y como oportunidad para contribuir a la economía local y a la supervivencia del sector”.

De hecho, según su criterio, “la tecnología ha cambiado” el propio trabajo en las granjas y es ahora “más llevadero”. Aunque “siempre se ha vendido como un espacio de gran sacrificio”, añaden las entrevistadas, “el trabajo en el campo ha cambiado y hay que visibilizarlo en la sociedad”.

UN SECTOR ATRACTIVO

"Que el sector sea atractivo para las nuevas generaciones es responsabilidad de los que están ahora gestionando los negocios”, destacan las ganaderas que han participado en el estudio, porque en este momento “la única manera de dedicarse al sector es a través del relevo generacional, pero, tristemente, el número de granjas va a menos”.

“Quien lo ha vivido desde pequeño, ya lo siente como propio, pero tenemos que acercarlo al resto de la sociedad para poder contar con más mano de obra y así poder invertir y seguir ampliando los negocios”, insisten.

Desde su punto de vista, el reto, afirman, es “lograr que el trabajo no sea trabajo y eso solo se consigue cuando haces lo que te gusta, en el sector lácteo y en cualquier otro ámbito”.

El hecho de que las nuevas generaciones vean complicado el medio rural como una opción laboral de futuro tiene que ver con las propias circunstancias del sector, porque “es complicado cubrir costes de producción” y, además, hay que hacer frente a situaciones coyunturales, como son ahora “la sequía y la inflación”, precisan.

Por otra parte, recuerdan que la Administración también debe jugar un “papel clave para facilitar el desarrollo de negocios en el campo”, porque “a pesar de contar con liquidez, hay muchas trabas administrativas”.

Las participantes en este estudio reconocen que la situación de la mujer en el rural ha cambiado, “pero todavía queda camino por recorrer”, como en otros ámbitos de la sociedad.