Su nombre español es 'estrella' y lleva unos días en la ciudad
Yin Xingyuan enseña chino a los niños de Lugo: "La gente es muy amable, escucha cuidadosamente y hace un esfuerzo por entenderme"
Es una auxiliar de conversación que se ha incorporado a la Escola Oficial de Idiomas a través de un convenio entre la Xunta y el Centro Chino para la Cooperación y el Intercambio Internacional en Materia Lingüística
Lugo - Publicado el - Actualizado
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Yin Xingyuan acaba de llegar a Lugo. Es una auxiliar de conversación que se ha incorporado a la Escola Oficial de Idiomas a través de un convenio entre la Xunta de Galicia y el Centro Chino para la Cooperación y el Intercambio Internacional en Materia Lingüística.
Este curso será la encargada de impartir las clases de ese idioma que se ofertan como actividad extraescolar en tres colegios de la capital lucense. Esta iniciativa, única en Galicia, se puso en marcha el año pasado en los colegios Rosalía de Castro e Illa Verde. Este curso se ha sumado también la Anexa.
Estrella, que es el nombre español de Yin, está en la ciudad desde "hace sólo una semana". A los estudios de COPE Lugo llega acompañada por Alma López, que es una de las profesoras de Chino de la Escola Oficial de Idiomas, que ofrece una programación regular para aprender este idioma desde hace más de diez años, para personas a partir de los 14 años. Su colaboración facilita las cosas, le da seguridad, porque domina el español, pero algunas expresiones o giros lingüísticos pueden inducirla a confusiones.
Todavía está adaptándose a las enormes diferencias culturales y lingüísticas que existen entre su país de origen y la ciudad en la que acaba de aterrizar. "Llevo aquí sólo una semana, pero estoy muy cómoda", confiesa. Y eso que "la comida es muy diferente". Sobre todo la "manera de cocinar", porque en su provincia natal, en Sichuan, "los platos son muy picantes".
"POlbo á feira"
Por eso, nada más llegar, probó uno de los platos más típicos de Lugo y que lleva picante: el "polbo á feira". Fue una de las primeras cosas que hizo, de hecho. "El primer día, cuando llegué, fui a un restaurante y probé el pulpo á feira, y me gusta mucho". De lo que ha probado, también le gusta "el queso y el jamón".
En cuanto al clima, ha llegado en pleno otoño, una época del año en la que el tiempo es más bien inestable, pero esa circunstancia no la asusta demasiado. "En China, ahora también hace mucho frío. Creo que hace más frío que en Lugo. Allí el invierno ya ha llegado", precisa.
Tampoco se ha encontrado hasta ahora con demasiados problemas para entenderse con la población local. "En la residencia vivo con muchos estudiantes de universidad y todos hablan inglés", confiesa Estrella, "y cuando estoy fuera puedo ayudarme de gestos". En todo caso, reconoce que, al menos para el día a día, no necesita "muchas palabras", porque "la gente aquí es muy amable y, si necesito ayuda, son muy pacientes. Escuchan cuidadosamente y hacen un esfuerzo por entenderme".
Además de enseñar chino, también aspira a empaparse de la cultura local y a mejorar su notable nivel de castellano. "A veces, si estoy en la calle, si hay oportunidad, hablo con las personas mayores, que están con sus perros. Hablamos un poco para practicar español y aprender más de la vida aquí".
En cuanto al trabajo y a los horarios para organizar el día, precisa que es "muy diferente". Lo primero, y que marca en cierta medida el discurrir de la jornada, "es la hora de la comida".
"En China siempre comemos muy temprano. El almuerzo lo hacemos a las once o las doce del mediodía y la cena a las cinco o seis de la tarde", aclara. Se va acostumbrando, poco a poco, pero los primeros días siempre "tenía hambre", bromea.
"los niños tienen mucha energía"
En cuanto a su trabajo en los colegios, nos cuenta que tiene "alguna experiencia en enseñar a los niños de primaria y a los de secundaria" en su país. También a familias que están desplazadas en China. Reconoce que "la personalidad de los niños es muy similar", con mucha "energía" y, además, "aquí las escuelas tienen muchos medios".
En la actualidad, en los colegios de Educación Primaria de Lugo hay cinco grupos de chino. El año pasado había sólo dos, pero en los dos primeros colegios en los que se puso en marcha esta iniciativa han formado dos grupos de continuidad y se mantienen los dos de iniciación, al que hay que sumar el implantado este año en la Anexa.
La matrícula está abierta hasta final de mes, por lo que Alma López confía en que "pueda aumentar mucho más".
Yin Xingyuan, Estrella en Lugo, estará hasta junio, pero después de sólo unos días en la ciudad, confiesa que, llegado el caso, no le importaría quedarse otro año más. Bienvenida.