Rúa, una perra marcada por el abandono: una protectora de Lugo lucha por su recuperación y un hogar definitivo

Hemos oído miles de veces aquello de que “el perro es el mejor amigo del hombre” o “no hay amigo más fiel que un buen perro” pero, entonces, ¿cómo es posible que se lleven a cabo tantos abandonos? 

Son múltiples los mensajes que día tras día se comparten en redes sociales con fotos de perritos entrañables que andan solos por alguna de las carreteras de La Mariña Lucense o el Occidente de Asturias. Y eso se reproduce igual en el resto de zonas geográficas en las que habites. “Anda desorientado, está perdido, perro abandonado”... sea como fuere, acaban solos y desamparados más veces de la cuenta.

que se cumpla la ley

Esto es algo que denuncian constantemente las protectoras de animales, exigen que las administraciones sean más restrictivas y rigurosas a la hora de aplicar la Ley de Bienestar Animal.

Sobre todo en los relacionado con la identificación y castración. Sara Rey es voluntaria en la Protectora Coletiñas de Cervo (Lugo) y explica que le resulta “increíble que, a día de hoy sigan llegando a las instalaciones perros sin identificar”. La Ley recoge que los perros y gatos deben estar identificados, desparasitados, vacunados y llevar el microchip. Y eso no es lo que se encuentran día tras día.

rúa necesita un hogar

Un ejemplo de ello es Rúa, una perra, cruce de pastor, que tienen en estos momentos acogida y a la que buscan una casa. “Tiene muchos miedos, llegó preñada, sin chip, llena de parásitos y tiene muchísimo miedo, a pesar de llevar dos años con ellos”. Para Sara es el caso más grave que tienen en estos momentos. Le gustaría “encontrarle una casa porque en la protectora no mejora”, necesitaría una persona que tuviera paciencia. Sara incide en que “es muy buena pero tiene muchisimo miedo, debió de pasarlo muy mal antes de llegar a nosotros para que esté en ese estado”.

Nos cuenta que en estos momentos cuidan de 24 animales, entre perros y gatos. No dan abasto para todo el trabajo que supone las diez personas voluntarias que se turnan allí en los cuidados. Les gustaría tener menos animales, porque eso supondría que están bien cuidados en sus casas, pero la realidad es tozuda.

También apelan a los amantes de los animales porque necesitan más manos para llevar adelante el trabajo, si hubiera más voluntarios podrían turnarse mejor y distribuirse el trabajo. 

el dinero no sobra

Y el dinero es algo que también escasea. Cuentan con una subvención del Ayuntamiento de Cervo, “que se amplió este año, estamos muy agradecidos”. Y el resto van cubriendo poco a poco porque “si que es bastante gasto el que tenemos, porque no solamente atendemos a los animales que tenemos en instalaciones, sino que también hacemos el método CES (Captura, Esterilización y Suelta) con los gatos, eso supone un coste altísimo”.

A esto hay que añadir la atención veterinaria a animales enfermos, el pienso... “el dinero se va en nada, la verdad, es que las protectoras necesitan mucha ayuda económica”.

si no puedes cuidarlo, no lo tengas

El mensaje que lanza Sara Rey a la gente es muy sencillo: “Si no pueden atender un animal que nunca lo cojan, es una responsabilidad para toda la vida, como si fuera un niño. De verdad, si fuéramos más responsables con los animales que tenemos la situación sería tan diferente”.

Ellos reciben constantemente mensajes de gente que les pide que le cuiden al gato porque van a hacer una mudanza, o una perra que parió y cuando le recogen a las crías, gente que abandona sus gatos en colonias que ya tienen controladas...

Concluye Sara pidiendo "que piensen en todo lo que puede pasar y si no se pueden hacer cargo de los animales, que no los tengan, la situación mejoraría bastante".