Un vecino de Mondoñedo (Lugo) atesora el secreto para elaborar carbón vegetal

Un oficio olvidado, perdido en el tiempo, mantiene viva una pequeña llama gracias al vecino de Mondoñedo Luis Caselas, que heredó de su familia el arte de hacer carbón vegetal. Su padre, abuelo y bisabuelo eran herreros, y elaboraban el carbón vegetal para la fragua, para hacer la herramienta.

La elaboración supone un proceso largo y complejo, hoy día no es económicamente rentable, pero en su momento era muy útil, sobre todo porque el carbón de mina era caro y ellos lo necesitaban para la forja familiar. 

Trabajaban mucho la herramienta de corte, hoces y herramienta para los zoqueiros, "eso era muy delicado y se controlaba mucho mejor con el carbón vegetal, aparte que se hacía también fundición, se fundían los materiales para hacerlos, y el carbón de piedra no valía". La razón es que el carbón de mina traía particulas que para la fundición no iban bien.

AL MONTE A CORTAR LEÑA 

Y luego estaba la cuestión económica porque en casa eran siete hermanos, el dinero no sobraba así que iban al monte y hacían el carbón de leña: "el carbón era muy caro y el dinero no daba para comprar". Cuenta Luis que "muchas veces íbamos a la orilla del río que había árboles, hoy es inviable, y los cortábamos y traíamos la leña para casa".

la "foia"

¿Y cómo es el proceso? El carbón vegetal se obtiene a partir de un hoyo cavado en la tierra, de 80 por 70 cm, en el que se introduce leña verticalmente (en cada hoyo caben unos 2.000 kilos de leña). Se enciende un fuego en el centro y la madera se va apiñando, siempre en forma vertical y sin que queden huecos por medio. Luego se añade leña más fina para que vaya haciéndose y cuando sale la llama se tapa con hierba y tierra al alrededor. La leña sobresale aproximadamente un metro en el exterior. Se deja ahí durante ocho días hasta que se consuma. A esto se le llama "foia". Y al cabo de ese tiempo ya tenemos hecho el carbón vegetal. Por cada "foia" salen ocho o nueve sacos de carbón.

Luis Caselas es de los pocos que quedan en la zona que sepan cómo hacerlo. Tiene 73 años y es el "único del barrio que sabe cómo hacer el carbón, la gente... nadie sabía, se quedaron asustados de cómo se hacía el carbón y mira que es una cosa fácil pero bueno, hay que saberlo".

Aunque antiguamente usaban el carbón resultante para la fragua, este domingo se va utilizar para algo bien diferente, en el seno de una demostración que organiza Luis en Mondoñedo. Gastará algún saco en hacer un churrasco y disfrutarlo con los vecinos, junto a unas cervecitas, una fiesta. Si no quieres perdértelo tienes que estar en el Coto da Recadieira a partir de las 10.30 hrs, el domingo 15 de diciembre.