Viveiro suspenderá todas las actividades "no esenciales" a partir del jueves

El municipio mariñano de Viveiro cerrará todas las actividades "no esenciales", según ha informado el comité clínico que asesora a la Xunta de Galicia.

El número de casos activos se sitúa en 267, pero lo que más preocupa es la evolución de la incidencia acumulada a 14 días, que ha pasado de 1.034 afectados por 100.000 habitantes la semana pasada a 1.681 en la última jornada.

La suspensión de toda actividad no esencial provocará, entre otras medidas, el cierre de las terrazas de los locales de hostelería -se mantiene el servicio de recogida en barra y entrega a domicilio-, el cese de actividad de los gimnasios y salas de juegos, la restricción de uso de bibliotecas y la suspensión de cualquier actividad cultural o social, cines y teatros incluídos.

No obstante, el comercio minorista podrá operar con relativa normalidad, teniendo en cuenta las medidas de prevención y aforo vigentes hasta el momento.

Las nuevas restricciones entrarán en vigor este jueves a las 00.00 horas.

María Loureiro: "Desde marzo, la peor situación"

La alcaldesa de Viveiro, María Loureiro, ha señalado en declaraciones a COPE de la Costa que ya era conocedora de la decisión del comité clínico desde la pasada noche, cuando recibió una llamada telefónica del gerente del área Sanitaria de Lugo, A Mariña y Monforte de Lemos, Ramón Ares, para informar de las nuevas restricciones.

Loureiro ha señalado que "la situación es mala, la peor desde marzo", pero también ha mostrado cierto optimismo por el ligero descenso de la incidencia en las últimas horas -de 271 a 267 casos activos- y por la posibilidad de alcanzar el "tope máximo de contagios" al final de la próxima semana.

La regidora viveirense recordó que durante estos días "se han relizado muchas pruebas", especialmente entre los contactos directos de quienes arrojaron un resultado positivo en el cribado masivo efectuado hace dos semanas.

Loureiro quiso mandar también un mensaje de apoyo al sector más afectado por la pandemia, los hosteleros, a quienes descargó de culpas mayores al afirmar que "las terrazas están casi vacías por culpa del frió y la lluvia", por lo que "no es ahí donde está el foco".