Peluquerías gallegas, espacios contra el maltrato: "Se fue soltando y contó que su marido le pegaba"

Cristina y Vanesa no sólo se dedican a arreglar uñas o a hacer peinados. También escuchan a las clientas que cada día entran en sus establecimientos de estética y peluquería que, a veces a media voz y por capítulos, cuentan historias tremendas. "Tuvimos una clienta a la que el marido le pegaba y al final, sacó el valor de su familia, de la gente que la quería, y acabó denunciando". Lo cuenta Cristina, que acaba de abrir en Santiago un salón de estética que se llama "Meraki": en griego significa hacer las cosas con cariño y la joven emprendedora se toma así no sólo el arreglo de las uñas. 

Cuenta que la mujer necesitó tiempo para tomar la decisión, pero acabó separándose de su agresor. Confiaba en Cristina y sus compañeras lo que le ocurría en casa y ellas, además de escucharla "durante bastante tiempo", le decían que "así no podía seguir, esta persona te está machacando... tanto físicamente como emocionalmente" 

Vanesa también ha sido confidente de situaciones de agresión y junto a sus compañeras, en un salón de peluquería de Santiago, tampoco se quedaron mano sobre mano. Llegaron incluso a llamar a las clientas, fuera del trabajo, para preocuparse por su situación. En todos los casos, las mujeres les dieron las gracias.

Lo que más le preocupa es que cada vez percibe situaciones de machismo entre gente más joven: "eu preocúpome moito, porque vexo casos na xente xoven realmente alarmantes, que normalizan situacións que me parece unha aberración que cheguen a normalizar".

corta co maltrato, en más de 130 peluquerías

Testimonios como estos dan buena cuenta de que este tipo de establecimientos, a los que las mujeres acuden en muchas ocasiones solas, acaban siendo ámbitos donde se sienten seguras: "dise ás veces que as peluqueras parecemos psicólogas", recuerda Vanesa. 

Y en esta idea se apoya la nueva campaña que acaba de poner en marcha el departamento de Igualdade de la Diputación de A Coruña. Ha arrancado en tres concellos, Carral, Culleredo y Cambre, donde ciento treinta y seis salones de estética se van a convertir en "axentes de detección e asesoramento ás mulleres".

A lo largo de este mes de noviembre, el personal de los establecimientos recibirá asesoramiento y se coordinará con los Centros de Información á Muller (CIM) de cada municipio. "Si teñen formación, poderán asesorar mellor ás súas clientas", explica en Cope la diputada provincial de Igualdade, Sol Agra.

"É un proxecto de difusión viral", añade Agra, porque una vez que las profesionales están implicadas, van a servir también para sensibilizar a todo el entorno. La campaña se apoya además en materiales como vídeos en los que se pone el foco en la mujer que es víctima de una situación de violencia machista y también, en el de las profesionales que pueden apoyarlas desde un lugar tan acogedor como una peluquería.