El "modelo Oviedo" de recogida de basura llegará a Pontevedra a medias y años después de la propuesta del PP

El concejal de gestión de residuos de Pontevedra, Raimundo González, ha anunciado este lunes que la redacción de la nueva concesión para la recogida y gestión de la basura incluirá la obligación de que el casco histórico solo tenga contenedores en la calle durante horas determinadas y el resto del día, sean retirados.

Esta medida es exactamente la que, en 2019, el PP de Rafa Domínguez incluída en su programa electoral tomando como ejemplo el servicio en la ciudad de Oviedo. La propuesta pretendía llevarlo a cabo en toda Pontevedra y no únicamente en el casco histórico, ya que el propio Domínguez denunciaba la mala imagen que dan contenedores llenos durante el día en calles comerciales como Benito Corbal.

Ahora la concejalía del BNG llevará a la práctica este sistema aunque no será en un plazo corto de tiempo, dado que la junta de gobierno local acaba de aprobar el régimen jurídico del servicio -que pasará de ser un contrato a una concesión de servicio-, el anteproyecto de explotación y el plan de viabilidad del servicio.

En este futuro contrato se recoge que el servicio de recogida de basura se prestará los 7 días de la semana en todo el ámbito urbano y 2 o 3 días a la semana en el rural, según sus necesidades.

También contempla la renovación de los medios materiales del servicio desde el inicio de la concesión y, nuevamente, a los 10 años de su entrada en vigor (desde los camiones, pasando por los contenedores hasta la maquinaria de la futura planta de compostaje).

La inversión inicial del contrato asciende a 23,2 millones de euros "de entrada", matizaba el concejal nacionalista, porque la obligación de tener que renovar gran parte de los medios materiales a los 10 años situará la inversión al final del contrato en cerca de los 40 millones de euros. También van incluidos los 10,2 millones de euros de la planta de compostaje.

La tramitación del nuevo contrato de la gestión de los residuos municipales continúa ahora con la preparación con los pliegos administrativos y técnicos y su posterior aprobación por parte de la Xunta de Goberno, y la apertura del proceso de contratación. La licitación será por un valor de 10,7 millones de euros al año.

Sobre incrementos del precio en el recibo de los usuarios, Raimundo González únicamente hizo referencia a posibles bonificaciones por buen uso del compostaje.