Un padre de Vigo, desesperado por el acoso de una pandilla de menores a su hijo: "Le cortaron la oreja"

Denuncia que son "muchos" los afectados por estos chavales, que actúan con total impunidad por la ciudad olívica

Paula Pájaro Rives Redacción COPE Galicia

Santiago - Publicado el - Actualizado

3 min lectura

      
      
             
      

Tres meses de terror. De auténtico pánico. Es lo que lleva viviendo una familia, aunque son más perjudicados por la acción de varios grupos de jóvenes pandilleros.

Las agresiones comenzaron en septiembre, pero las amenazas se remontan a un par de años atrás.

Todo comenzó en un partido de fútbol. Un chaval de 14 años vivió en sus carnes lo que es ser diana de bromas, chistes y burlas. Su padre estaba presente y les recriminó la actitud a quien se estaba metiendo con su hijo. Ahí empezó su particular pesadilla: "Mi hijo jugaba bien al fútbol. Ese hecho provocó que una parte de la grada se metiese con él. Te vamos a reventar, le decían. Yo pensé que era la típica discusión tonta. Pero el chico que se burló de él se metió en una pandilla de matones". Tuvo que aguantar de todo, incluso amenazas con armas: "La pandilla de matones andan por la ciudad y se meten con los críos. Puños americanos, pistolas Taser, hasta gas pimienta".

Se trata de menores, pero el grupo se dedica a extorsionar a chicos por la calle: "Hay hasta de 18 años y son muchos". Explica este padre que se ha decidido a denunciarlo. "El 90% de la gente no quiere hablar. Tiene miedo. Temen represalias con sus hijos".

El hijo de este padre vive una auténtica pesadilla cada vez que sale de casa: "Van a por él. Un día comenzaron a subir el nivel. Mi hijo contestó a los golpes como pudo. Agarró una botella y se defendió". 

el modus operandi de las pandillas de vigo: "extorsión y humillación"

El grupo de agresores pasa las horas por el centro de Vigo buscando víctimas: piden a los chavales, sobre todo menores, dinero, zapatillas, el móvil. Hasta se graban en situaciones completamente humillantes para las víctimas: les piden que se arrodillen, que besen los pies del supuesto cabecilla o que le llamen patrón.

      
             
      

El único padre que ha decidido dar un paso al frente denuncia este sinvivir: "A raíz de denunciarlo, un montón de números, mil amenazas llegaban al móvil de mi hijo por WhatsApp, hemos tenido que bloquear esos contactos". Así que esta familia no se lo pensó: quiso denunciar públicamente lo que estaban padeciendo y en los medios. Eso sí, sin mostrar el rostro, ni decir nombres, porque se temen que incluso las cosas vayan a peor.

PUÑOS AMERICANOS O PORRAS EXTENSIBLES: "HASTA QUE MATEN A ALGUIEN"

Este padre, incluso, fue a hablar con mediadores de los agresores: "Me dieron su palabra de que no lo iban a tocar más. Pero mi hijo y sus amigos salieron a ver las luces, iban paseando y vieron a los encapuchados ir a por ellos". En ese momento, hace apenas unos días, sufrieron esta nueva agresión: "con cinturones, con cuchillos, con puños americanos, porras extensibles..." 

Su hijo pudo salir porque iba acompañado y el joven pudo llamar a la policía.

      
             
      

Hace 10 días, este chaval de 14 años, padeció una de las agresiones más graves: "Le cortaron la oreja"

Cedida

El menor necesitó puntos en la oreja debido a la agresión

Más allá de las secuelas físicas, están las psicológicas: "Yo sé que mi hijo tiene un trato con cualquier persona, excelente, pero así es imposible. A raíz de la presión mediática, la Fiscalía está más en el asunto. La Policía me trata muy bien... Ahora es un juez quien tiene que decidir si los mete en un centro o nos dan una orden de alejamiento". 

Este padre quiere poner freno a estas situaciones antes de que haya una escalada de violencia: "Son carne de cañón. Acabarán entrando en la cárcel. El problema es que suben de intensidad y a ver a quién le toque... hasta que maten a alguien".