PSA Vigo debe vender un coche eléctrico por cada cuatro vehículos de diésel y gasolina
Esta es la medida necesaria para poder cumplir con la norma de emisiones que entra en vigor en 2020.
Madrid - Publicado el - Actualizado
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El grupo PSA debe vender el próximo año un 7% y 9% de vehículos eléctricos para cumplir la nueva normativa de emisiones de CO2, que entra en vigor en 2020. La dirección de la planta en Vigo asegura que están "preparados" porque llevan "mucho tiempo trabajando" para abordar los retos de la transición energética y que acatarán "escrupulosamente".
Además, subrayan que la hoja de ruta fijada responde al "compromiso ético" que mantiene la empresa con el medio ambiente, pero también al hecho de que el fabricante "no quiere pagar las sanciones". han explicado estas fuentes, que han subrayado que esa hoja de ruta responde a un "compromiso ético" con el medio ambiente, pero también al hecho de que el fabricante "no quiere pagar las sanciones".
NORMATIVA QUE ENTRA EN VIGOR EN 2020
La nueva normativa obligará a los coches de segmento B y C, los que mayoritariamente se producen en Vigo, a no superar los 93 gramos de CO2 por kilómetro (el límite es de 147 gramos para los vehículos comerciales). Si PSA se pase un solo gramo de ese límite, la sanción estimada es de 300 millones de euros, por lo que desde la empresa no están dispuestos a llegar a ese punto. Cumplirán con la normativa y para ello deberán producir - y vender - un coche eléctrico por cada cuatro vehículos de combustión térmica - diésel y gasolina-.
RETOS DE LOS COCHES ELÉCTRICOS
PSA Vigo han recordado que la planta ya fabricaba versiones eléctricas -con la tecnología de entonces - en 1995. Asimismo, el nuevo modelo, Peugeot 2008, que se lanzará en las próximas semanas, tendrá su versión 100 por cien eléctrica en el primer trimestre de 2020. La empresa reconoce que la nueva normativa es muy "exigente" y va a "condicionar" los procesos de producción hasta tal punto que es posible "que ponga a a algunos constructores en dificultades".
Apunta también que "imprescindible que las administraciones, que fuerzan a la transición energética, desplieguen sistemas de recarga y hagan los coches eléctricos más atractivos, con incentivos para los compradores". De hecho, la expansión del vehículo eléctrico se encuentra con otra dificultad adicional y, quizá de las más determinantes, y es su alto precio. Las baterías de los coches eléctricos siguen suponiendo un 60% del valor del vehículo.