Se van de vacaciones a Mallorca y toman una decisión al ver la carta de un bar para comer: "De un pueblo"
Hay muchas formas de irse de viaje, pero hay destinos que están sufriendo de una forma clara la llegada de turistas de otras partes del mundo con otro poder adquisitivo
La plaza en la que intentan comer en Mallorca
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Los hoteles, aerolíneas, bares, restaurantes y empresas de ocio en España probablemente estén viviendo el mejor verano de su historia, teniendo en cuenta las previsiones del sector. Pero hay zonas en las que los precios están alcanzando un nivel inadmisible para el turista nacional. Algo así le sucede a estos jóvenes en Mallorca que hacen esto delante de un bar.
Una parte muy importante de ese récord será responsabilidad directa del turismo extranjero, que sigue ganando peso frente al nacional en España y que va a alcanzar este verano un nuevo máximo histórico, ya que antes del verano representaba un 68 por ciento de las reservas, según los datos del último informe de tendencias de la plataforma Siteminder.
Si en 2023 se cosechó un récord después de que llegaran 85,1 millones de viajeros extranjeros, que realizaron durante sus estancias un gasto de 108.662 millones de euros, las cifras de 2024 seguramente sean aún mejores. Ser un destino líder es siempre una buena noticia y debemos seguir trabajando para además de encabezar las preferencias de los turistas.
Pero la realidad es que al turista nacional se le pone cuesta arriba ir a cualquier destino dentro de la península. Pasar este verano en cualquier punto de España es más caro que nunca, consecuencia de la subida de precio histórica en la oferta turística, por encima de la inflación general.
Vacaciones
El sector anticipa que no se ha tocado techo en cuanto a precios, pues hoteles, restaurantes y actividades de ocio siguen resultando más económicos que en destinos competidores del mediterráneo y resto de Europa, tal y como se puede ver analizando los datos del INE y de Eurostat.
Mientras unos lo celebran afirmando que este es el camino a seguir para que España no compita en precio, sino en calidad, para parte de la población pasar una semana de vacaciones en su propio país se ha vuelto un lujo. Ir a Mallorca, la costa valenciana o la andaluza se convierte en algo prohibitivo.
La llegada del verano ha disparado el precio de los paquetes turísticos nacionales que se han encarecido un 21,7 por ciento el pasado mes de junio en comparación con el mismo periodo del año anterior, según reflejan los datos del IPC publicados este viernes por el Instituto Nacional de Estadística.
Esto está llevando a muchos españoles a optar por pasar sus vacaciones fuera de España. Muchos comparan los precios en distintas zonas de playa, como Cádiz o las Islas Baleares, y terminan optando por destinos como Italia. Aun así, hay quien sigue atreviéndose a viajar por la península o los puntos insulares y se encuentran una realidad dura.
Toman una decisión al ver la carta de un bar
Los turistas nacionales compiten con viajeros internacionales, quienes, con su mayor poder adquisitivo, elevan los precios aún más. Según el INE, en mayo los precios de los hoteles y restaurantes subieron un 5,2 por ciento en comparación con 2023. Estos datos se pueden corroborar con lo que sucede en el vídeo de estos turistas en Mallorca.
Los precios en los restaurantes y cafeterías también han seguido una tendencia al alza, con un aumento del 5,6% en comparación con el primer trimestre de 2023. Este incremento se siente directamente en los bolsillos de los consumidores, que deben enfrentar mayores costos al salir a comer fuera.