El obispo de Mallorca propone leer la encíclica "Fratelli Tutti" para lograr regenerar la política

Monseñor Sebastià Taltavull ya ha enviado el texto a diputados y alcaldes de Mallorca para que conozcan lo que el papa llama 'la mejor política' y reclama diálogo constructivo

Cristina Requena

Mallorca - Publicado el - Actualizado

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En medio del actual contexto político tan crispado, tanto a nivel nacional como autonómico, el obispo de Mallorca pone sobre la mesa la necesidad de rehabilitar la política. Monseñor Sebastià Taltavull, en un mensaje a la diócesis, pide diálogo constructivo. "Cuando ha resonado recientemente la necesidad de regenerar la democracia, nos sentimos interpelados a actuar desde el propio ámbito, no solo por emergencia, si no por perenne responsabilidad", señala el obispo.

En su mensaje Taltavull explica "hace tiempo que escribí siguiendo un documento de los obispos franceses sobre rehabilitar la política, para responder a situaciones parecidas a las que vivimos en los diversos escenarios de nuestra sociedad. Las vivimos y también las padecemos y las padecemos, cuando en tantos lugares, lo que debería ser el arte para una auténtica convivencia se degrada en una lucha obstinada por el poder a coste de cualquier precio".

Para el obispo, los cristianos necesitamos y hemos de responder aportando elementos para una regeneración ética que vaya gestándose con la letra y el espíritu de los derechos humanos y ofreciendo aquellos valores evangélicos que iluminen decisiones y sobre todo provoquen actuaciones valientes.

La encíclica del papa que el obispo ha enviado a los políticos de Mallorca

"Ha sido en este contexto de necesidad de luz, que he releído algunos fragmentos de la encíclica 'Fratelli Tutti' , 'Hermanos Todos', del papa Francisco. "Un texto que envié a los políticos parlamentarios y alcaldes de nuestra isla porque consideré necesario compartir con ellos lo que el papa llama la mejor política".

El papa Francisco constata que hace falta la mejor política puesta al servicio de un verdadero bien común, ya que desgraciadamente hoy la política a menudo suele asumir formas que dificultan la marcha hacia un mundo distinto. Para nosotros regenerar la democracia querrá decir caminar siempre hacia esa realidad distinta, con la aportación valiosa de toda la ciudadanía.

Recuerda el obispo "Francisco habla del gusto de reconocer al otro que conduzca a la gestación de un pacto social. Sin este reconocimiento surge maneras sutiles de buscar que el otro pierda todo significado y que no se le reconozca ningún valor en la sociedad. Por eso queremos optar por lo que él llama el amor político, es decir, avanzar hacia un orden social y político cuya alma sea la caridad social. Por ello veo muy necesario y muy oportuna la invitación que nos hace convocándonos a rehabilitar la política cuando nos dice que es una altísima vocación y una de las formas más preciosas de la caridad porque busca el bien común".

La política también está presente en el Evangelio

Contemplando en el Evangelio, incluso la actuación de Jesús, que es nuestro referente en todo, debemos reconocer que el amor lleno de pequeños gestos de atención mutua es también civil y político, y se manifiesta también en las macro relaciones sociales, económicas y políticas.

"Refiriéndose el Papa a la buena política, dice que une al amor, la esperanza, la confianza en la reserva de bien que hay en el corazón del pueblo a pesar de todo y que en la actividad política. El que ha dejado de entender la política como una búsqueda de poder tiene la seguridad de que no se pierde ninguno de sus trabajos realizados con amor , que no se pierde ningún cansancio generoso, que no se pierde ninguna dolorosa paciencia".

Se llega así a una reconstrucción en común y a descubrir que un país crece cuando mediante el diálogo social sus diversas riquezas culturales dialoga de manera constructiva. Pero, no confundamos el diálogo con un febril intercambio de opiniones en la redes sociales. Muchas veces orientado por información mediática, no siempre fiable. Son solo monólogos que proceden paralelos, quizás imponiéndose la atención de los demás por sus tonos altos o agresivos.

Para Taltavull "entristece que prime la costumbre, descalificar rápidamente al adversario, aplicándole epítetos humillantes en lugar de enfrentar un diálogo abierto y respetuoso donde se busque alcanzar una síntesis superadora. Lo peor es que este lenguaje habitual en el contexto mediático de una campaña política se ha generalizado de tal modo que todos lo utilizan incluso cotidianamente".

Pide el obispo que pensemos bien en ello, "ya que como dice el Papa los héroes del futuro serán los que sepan romper esa lógica enfermiza y decidan sostener con respeto una palabra cargada de verdad más allá de las conveniencias personales. Dios quiera que esos héroes se estén gestando, ya silenciosamente en el corazón de nuestra sociedad".

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