Las federaciones piden que se las tenga en cuenta en la toma de decisiones

Con el desconfinamiento, como quien dice, a la vuelta de la esquina, no son pocos quienes comienza a prepararse para la vuelta a una normalidad que, más que probablemente, no será tal ya que está claro que el fin del confinamiento en casa traerá también medidas de seguridad para evitar un nuevo brote. Dentro de esos grupos de personas que se preparan para salir definitivamente de sus casas se encuentran los deportistas y, en ese sentido, tres federaciones de baleares, la de Carreras de Montaña, la de Ciclismo y Atletismo, le han presentado una propuesta a la Direcció General d'Esports del Govern Balear ejerciendo de interlocutores del resto de federaciones deportivas.

En esa propuesta, explica Fernando Gilet, presidente de la Federación Balear de Ciclismo que “con el afán de aportar y contribuir, las tres federaciones de deportes individiuales como los nuestros, a la administración pública ante el supuesto de una reactivación deportiva en las próximas semanas acordamos presentar un plan de mínimos que estaría en consonancia con una vuelta gradual a la actividad deportiva”

Dicha propuesta, que está en manos ya de los responsables de la DGE del Govern Balear desde el día de ayer tiene un único propósito que no es otro que el de solicitar a los responsables públicos, los encargados en conjunción con las autoridades sanitarias de dar el ok al desconfinamiento progresivo tengan en cuenta a las instituciones deportivas y federaciones de cara a tomar las decisiones que se crean convenientes ante la posibilidad de retomar la actividad deportiva en las islas.

La proposición de este trío de federaciones es una de las solicitudes que también se están haciendo desde otros ámbitos deportivos y por parte de algunos deportistas destacados de las islas como Mavi García en su día o más recientemente un Rafa Nadal que reconoció, respetando siempre a quienes toman decisiones, no entender demasiado porque no podía entrenar en un deporte como el tenis en el que las distancias entre entrenador y jugador o rivales son más que evidentes.