Un Avarca Menorca de leyenda gana la Copa de la Reina
El conjunto menorquín hace buena su condición de anfitrión y consigue su primer entorchado copero tras una emocionante final ante el Heidelberg Volkswagen, rival también en liga. Esta temporada llevan Supercopa y Copa de la Reina
Las jugadoras y cuerpo técnico del Avarca Menorca, con el título copero
Mallorca - Publicado el
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Suele decirse, en el mundo del deporte, que cuando un equipo ejerce de anfitrión de una competición tiene muy complicado ganarla. Sin embargo, se dan ocasiones en las que esa situación no se da y ese ha sido el caso de un Avarca Menorca que ayer sí fue profeta en su tierra y logró llevarse la Copa de la Reina que se disputaba en Ciutadella. Las jugadoras entrenadas por Bep Llorens sumaron así su primer título copero en una emocionante final ante el Heidelberg Volkswagen de Gran Canaria, un equipo que, además, es su máximo rival en la liga ya que las canarias lideran la clasificación regular seguidas del propio equipo menorquín.
El Avarca Menorca, junto a las autoridades presentes en el partido
Comenzaron muy metidas en el partido las menorquinas y las de Gran Canaria que brindaban a los 1200 espectadores que poblaban las gradas y que estaban entregados a las de Bep Llorens que lograban anotarse el primer punto de la final con un parcial de 25-19 en poco más de media hora de juego superando además la lesión de Marcella Amaral. En el segundo set el dominio local era patente pero las visitantes se negaron a ceder el parcial de manera fácil llevando el resultado a un 25-23 que, eso sí, daba una clara ventaja a las Baleares en la final.
Las gradas, llenas para la final de copa
Sin embargo, no todo podía ser tan fácil y es que el Heidelberg Volkswagen se rebeló ante la adversidad en el marcador y dio un paso al frente en la tercera manga de partido para llevarse el punto y poner el duelo en un emocionante 2-1 que hacía presagiar un cuarto set no apto para cardíacos y así fue. Las visitantes comenzaron mandando en el marcador pero el Avarca Menorca tuvo claro que era su día y que nadie les iba a estropear la fiesta que ya se vivía en las gradas y así, el conjunto menorquín dejó atrás sinsabores coperos para sumar su primera Copa de la Reina y hacer estallar de alegría un pabellón que vivió, como bien señaló Bep Llorens tras el partido, un día histórico para el deporte menorquín y balear.