Empieza la demolición del edificio principal del antiguo Hospital Son Dureta

Tras más de cinco años de obras, el Hospital de Son Dureta ha empezado a ver un poco más disipado su futuro. Se ha iniciado el derribo de la fachada del centro sanitario con el fin de que este vuelva a tener una segunda vida después de más de cincuenta años de actividad hasta su cierre allá por el 2017.

El nuevo recinto contará con una residencia, un centro de día y un espacio sociosanitario. La residencia ya se ve como va tomando forma y se espera que para finales de 2025 o incluso 2026 pueda arrancar su actividad. Sin embargo, para el centro sociosanitario no está del todo claro, ya que se prevé como pronto que éste pueda estar activo a partir de 2027.

Una vez demolido el edificio, el director general del Servicio de Salud, Javier Ureña ha explicado que "empezará la fase de construcción del nuevo edificio", que tendrá la misma estructura semicircular y una superficie total de unos 44.000 metros cuadrados, destinados a pacientes que reciben tratamientos, cuidados y rehabilitación para recuperar su autonomía e integrarse en la sociedad.

La capacidad ha asegurado "será para 300 camas y contará con un área ambulatoria para 80 pacientes diarios que incluirá espacios de rehabilitación y consultas externas, y una unidad con 30 camas para tratar enfermedades como la demencia y trastornos de conducta." Además, habrá espacios destinados a los equipos de cuidados paliativos (ESAD), al Banco de Sangre y un área logística y de servicios.

En paralelo al derrumbe de este edificio, ha subrayado, "sigue en marcha la construcción del edificio B, de estancia larga, del que se ha ejecutado un 17 por ciento." En concreto, está formado por tres bloques destinados a pacientes de mayor complejidad, que necesitan cuidados especiales o no pueden estar en su domicilio.

Esta área tendrá una superficie de unos 38.600 metros cuadrados y contará "con una zona de hospitalización de 242 camas, un área de valoración funcional y un área ambulatoria con un hospital de día, con una capacidad de 80 pacientes diarios", espacios de rehabilitación funcional y cognitiva, y consultas externas.

Además, el edificio B también dispondrá de un centro de salud (con una previsión de 20.000 usuarios adscritos) y un servicio de urgencias de atención primaria (SUAP) para unos 120.000 usuarios.

La reforma se enmarca en el Plan de Infraestructuras del Servicio de Salud 2024-2027, con una inversión total de 434 millones de euros. Concretamente, la inversión prevista para el hospital de atención intermedia Son Dureta es de 178,4 millones de euros.