Cruce con semáforos: La obra de Vara de Rey en Logroño comienza en marzo y cortará el tráfico 5 meses

La Junta de Gobierno ha aprobado hoy la adjudicación del contrato de obras de construcción de la “Urbanización de la intersección de las calles General Vara de Rey con Duques de Nájera y Miguel Delibes y del entorno de la nueva Estación de Autobuses” a la U.T.E. NÁJERA, en el precio total de 4.188.980, 77 euros.

En Vara de Rey estará cortado el tráfico 5 meses. El plazo de ejecución de la obra, que comenzará a principios del próximo mes de marzo, será de 10 meses.

La baja respecto a la licitación ha sido de 7,97 %. El concejal de Desarrollo Urbano Sostenible, Jaime Caballero, ha expresado con transparencia las cifras reales de la actuación. Para la realización se cuenta con una aportación de LIF correspondiente al presupuesto restante después de resolver la obra anterior, en concreto 3.431.462,34 euros, con lo cual Ayuntamiento debe aportar otros 757.508,43 euros para cubrir el precio de adjudicación.

A esta cantidad hay que sumar la indemnización a la empresa de 276. 605,70 euros, que ya se abonó, lo que suma un total de 1.034.114,13 euros. Esta cifra incluye las mejoras solicitadas por el Ayuntamiento referente a la mejora de luminarias y pavimentos que suponía un 6,26% del total del presupuesto.

Por lo tanto, “para terminar de hacer el balance debemos restar la cantidad que debía pagar íntegramente el Ayuntamiento por la petición anterior de hacer el túnel, la cual ascendía a 864.605,74 euros, con lo cual el resultado económico del cambio de proyecto supone un incremento del 169.508,39 euros”, ha explicado, Jaime Caballero.

“Estas son las cifras reales, expresadas con total transparencia, pero tampoco es balance completo, ya que quiero recordar, que cuando llegamos en 2019, la obra estaba muy ralentizada, con una situación muy complicada, y que con toda seguridad hubiese ocasionado un modificado similar al de la estación de autobuses para poder continuar. A esta situación, para realizar el balance completo, también debemos sumar el alto coste de mantenimiento que supone los sistemas de seguridad de un túnel. Quiero decir con todo ello que nos sentimos satisfechos y convencidos de que desde todos los puntos de vista la ciudad sale ganado con el cambio de proyecto”, ha indicado Jaime Caballero.

Se trata de un cruce semaforizado que permitirá dar prioridad al sentido norte-sur de la ciudad y el ramal de Duques de Nájera, entre los números 2 al 8, se transformará en una calle de prioridad peatonal.

Una solución que acorta los trayectos peatonales, añade seguridad y permitirá dar prioridad al autobús urbano. El cruce semafórico permitirá, además, que los peatones puedan seguir recorridos directos a la vez que aumenta la seguridad de todos los usuarios de la vía. Asimismo, la regulación semafórica permite dar prioridad al sentido norte-sur en la calle Vara de Rey, que supone una arteria principal de entrada y salida de la ciudad.

El concejal de Desarrollo Urbano Sostenible, Jaime Caballero, ha mostrado como “se ha cambiado un túnel y una rotonda que dejaba solo un 30 % de espacio para las personas por una solución que recupera 4 000 metros cuadrados, el 65 % de espacio público peatonal”.

Una parte de esta superficie recuperada estará arbolada para mejorar las condiciones climáticas y de reducción del ruido. En este sentido, el ramal de Duques de Nájera, entre los números 2 al 8, se transformará en una calle de prioridad peatonal con plataforma única, una calle con el paso exclusivo de vehículos para acceso a garajes, lo cual dotará a ese espacio de un carácter totalmente calmado.

“Una distribución del espacio que es coherente con el modelo de ciudad que estamos impulsando y que está alineado con las directivas europeas, con la Agenda Urbana y con los compromisos adoptados para favorecer el bienestar y la salud de la ciudadanía y, con ello, hacer de Logroño una ciudad más atractiva para vivir”, ha dicho Jaime Caballero.

Caballero ha insistido en que este proceso ha sido “difícil, pero habrá merecido la pena” y ha explicado que “cuando propusimos continuar la obra sin hacer el túnel fue porque después de hablar con muchas personas la percepción del entorno había cambiado con la creación de los nuevos viales, la estación o el anuncio de la ronda sur, todo ello junto con los informes técnicos que cuestionaban la necesidad de hacer un nuevo túnel.

Y ahora, dos años después, en los que se ha hablado del futuro de las ciudades, de la descarbonización, de los ODS, de la salud, del cambio climático, del cambio modal de movilidad, creo que es más evidente que aquel cambio era necesario y ahora se entiendo mucho mejor”.