Alumnos del CEIP VARIA colocán chapas con mensajes en las alcantarillas de Logroño que acumulan suciedad

Los niños de 4º de Primaria del CEIP VARIA de Logroño se han implicado en el mal uso del plástico en la vida cotidiana. Por ello, dentro del proyecto CEHS (Centros Educativos Hacia la Sostenibilidad), están realizando varias actividades con el fin de reducir su uso.

Los alumnos han hecho un estudio de los residuos y de a dónde van a parar, observando la gran cantidad de suciedad acumulada en las alcantarillas de su barrio. Así que se les ha ocurrido poner algunas chapas con mensajes en las alcantarillas de la ciudad y han escrito algunas formales a varios concejales del Ayuntamiento de Logroño solicitando la limpieza y revisión del alcantarillado en el barrio de Varea.

Esta es una idea, ya conocida en otros países como Francia, que consiste en colocar una chapa en las alcantarillas en puntos estratégicos de la ciudad (lugares más frecuentados, puertas de colegio), con el fin de concienciar a los ciudadanos.

Red de Centros Educativos Hacia la Sostenibilidad

Es una red integrada por el conjunto de centros educativos riojanos que están desarrollando el proyecto CEHS, una iniciativa de la Consejería de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente y la Consejería de Formación, Educación y Empleo pensada para aquellos centros que desean trabajar en torno a un proyecto global que implique integrar la educación ambiental como parte de la vida cotidiana.

El proyecto pretende promover procesos de aprendizaje colaborativo que capaciten a la comunidad escolar, en especial al alumnado, a entender retos, asumir responsabilidades, tomar decisiones y ejecutar acciones para construir un centro educativo y una sociedad más sostenible. Actualmente forman parte de la Red una veintena de centros educativos de La Rioja.

En esencia el proyecto es una ecoauditoría escolar participativa a tres años. El primer año el centro educativo realiza un Prediagnóstico, un chequeo de su estado ambiental en ocho ámbitos: residuos, agua, energía, convivencia, alimentación, entorno natural (patio), movilidad y ruido. El segundo año se hace un Diagnóstico participativo, en el que se identifican los puntos concretos de actuación. Para ello se analiza, cuantifica, investiga y reflexiona sobre los problemas ambientales del centro. El tercer año se elabora un Plan de acción que ayuda a los alumnos a proponer, organizar, ejecutar y evaluar aquellas acciones que van a hacer al centro más sostenible.