El derrumbe de la torre de la iglesia de Viguera obliga a desalojar once viviendas y realojar a veinte vecinos

La noche de ayer quedará grabada en la memoria de los vecinos de Viguera. A las 21:42 horas, un estruendo rompió la tranquilidad del municipio riojano, la torre de la iglesia de la Asunción, un edificio declarado Bien de Interés Cultural, se desplomó repentinamente, cubriendo de escombros la zona y causando daños materiales de consideración.

El colapso movilizó de inmediato a los servicios de emergencia. Bomberos de Logroño, Guardia Civil, recursos sanitarios del Servicio Riojano de Salud y técnicos de SOS Rioja acudieron rápidamente al lugar para evaluar la magnitud del desastre y asegurar la zona. Entre los escombros, una vivienda resultó gravemente dañada y al menos cuatro vehículos quedaron parcialmente sepultados.

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La situación generó gran preocupación en el municipio, por lo que, por precaución, se desalojaron once viviendas, algunas de uso ocasional, y se procedió al realojo de veinte vecinos. Afortunadamente, no se han registrado daños personales.

Para descartar la presencia de posibles víctimas bajo los escombros, se activó también a la Unidad Canina de Rescate de La Rioja, mientras que el aparejador municipal de Logroño se desplazó a Viguera para evaluar el impacto del derrumbe en la estructura del templo y las edificaciones cercanas.

El ambiente en la localidad es de profunda consternación. Vecinos y autoridades lamentan la pérdida de una parte fundamental del patrimonio de Viguera y esperan que las investigaciones aclaren las causas del colapso. Al mismo tiempo, la Diócesis de Calahorra y La Calzada-Logroño, en coordinación con la Consejería de Cultura del Gobierno riojano, ya estudia las opciones para la restauración del templo.

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Mientras tanto, la prioridad sigue siendo garantizar la seguridad de la zona y atender a los afectados, que hoy intentan asimilar la magnitud de lo sucedido.