Chivite, presidenta de Navarra, “restringe” los comentarios en redes sociales para evitar “insultos"

La presidenta del Gobierno de Navarra, María Chivite, ha decidido “restringir” los comentarios de su cuenta en la red social X (antigua Twitter). Es decir, ahora solo podrán comentar sus publicaciones los usuarios a los que ella siga. Ha tomado la decisión porque, dice, no va a permitir que mis redes sociales sean una plataforma para la difusión del odio.

La cuenta está abierta y es público lo que ella comenta y escribe. Sin embargo, desde este jueves, ella no podrá leer las opiniones y comentarios que la ciudadanía haga en la red social sobre sus publicaciones, a no ser que sean seguidos por ella.

"Ha llegado el momento de decir basta", ha reiterado la presidenta

Esta decisión la ha anunciado en un comunicado publicado en la propia red social, del mismo modo que lo hizo el presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, cuando anunció que reflexionaría sobre si continuar en el cargo.

Su explicación

Según ha explicado la Presidenta, "esta red social nació para ser un foro de discusión abierto, pero la utilización que hacen algunos usuarios desde el anonimato ha pervertido este objetivo. Tal y como se puede comprobar en mi cuenta, cada una de mis publicaciones es contestada por una cascada de comentarios que incluyen amenazas e insultos ofensivos y, en su mayor parte, de índole machista".

María Chivite ha asegurado que no consentirá que utilicen su nombre, el del Gobierno o el de Navarra como altavoz. "En mi trabajo, día a día, defiendo la buena política. La que confronta ideas y es capaz de llegar a acuerdos. Y, en coherencia, respeto la opinión que cualquier persona pueda tener sobre mi acción política y defenderé siempre su libertad de expresión para expresarla con respeto", ha dicho.

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A partir de ahora podrán seguir comentando sus publicaciones las más de cuatro mil personas "de toda condición y de todos los colores políticos" que sigue ella. Y también ha añadido que no tiene "ningún inconveniente" en aumentar esa lista a más personas "de carne y hueso, con nombres y apellidos, que estén dispuestas a opinar lo que les dé la gana con educación".

"Ha llegado el momento de decir basta", ha reiterado la presidenta, ya que "el odio de las redes sociales no refleja la realidad de la calle, ni mucho menos. Pero si consentimos bullying virtual, estamos dejando la puerta abierta a que ese odio se extienda al mundo real". Un riesgo que, según ha concluido, "ya ha empezado a materializarse y contra el que todos y todas tenemos que actuar".