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Familias vascas piden sin éxito vetar por decreto el móvil en los centros educativos: "Hay una crisis silenciosa"

Agrupadas en Altza Burua y con 20.000 firmas entregadas en el Parlamento vasco no logran cambios en Euskadi, la única comunidad que deja en manos de cada centro la regulación de estos dispositivos

Elisa López

Vitoria - Publicado el

2 min lectura

      
      
             
      

La agrupación Altxa Burua, que representa a más de 12.000 familias vascas, ha solicitado al Departamento de Educación del Gobierno vasco, con el aval de 20.000 firmas, que todos los centros escolares sean declarados por decreto "espacios libres de móviles", como ocurre en los de Madrid y Galicia. 

Durante su intervención ante la Comisión de Educación del Parlamento Vasco, madres, educadores y expertos han advertido sobre los efectos nocivos del abuso de estos dispositivos entre menores, incluyendo mayores tasas de "obesidad, depresión, soledad y suicidio" y bajo rendimiento académico. 

"Por qué si no hay beneficios sobre el uso del móvil no se regula. La infancia y la adolescencia sigue sumergida cada vez más horas, más solos". 

Negativa de pnv y pse

“El tiempo de uso del móvil es excesivo y la supervisión, insuficiente. Las investigaciones son claras, cuanto menos y más tarde se use, mejor”, ha señalado Mirene Beriain, pediatra y portavoz del grupo. "Estamos ante una crisis silenciosa que afecta al desarrollo emocional, social y cognitivo de las nuevas generaciones".

Sin embargo, tanto el PNV como el PSE han descartado esta regulación general, defendiendo la autonomía de los centros escolares. Según Pedro Sáez de Castillo, portavoz del PNV, “la diversidad de realidades en los centros hace inviable una prohibición general por decreto”. Además, ha defendido que las competencias digitales son un "derecho" que debe garantizarse dentro del entorno educativo.

El móvil se entrega de media a los 11 años

Euskadi es actualmente la única comunidad autónoma que deja la regulación del uso del móvil en manos de cada colegio. Aunque Educación ha enviado orientaciones generales, Altxa Burua considera que esto no es suficiente para abordar la magnitud del problema.

      
             
      

La agrupación subraya que las escuelas libres de móviles favorecen un mejor rendimiento académico, incrementan la concentración y reducen el acoso escolar y ciberacoso. Además, fomentan las relaciones interpersonales y la actividad física, según han comprobado en los centros donde las familias han llegado a acuerdos para retrasar la entrega del móvil. 

Y recuerda la recomendación de la UNESCO en su informe GEM23 respalda su petición de convertir las escuelas en espacios sin presencia de móviles.

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