Un punto para empezar a cambiar

El Deportivo Alavés logró un trabajado empate (2-2) en su visita al Osasuna en El Sadar. Dos goles de Kike García y las espectaculares intervenciones de Antonio Sivera fueron clave para contrarrestar los méritos del conjunto navarro, que se había puesto en ventaja gracias a los tantos de Ante Budimir y Rubén García.

Inicio fulgurante del Alavés

El partido comenzó de manera inmejorable para los babazorros. Apenas habían transcurrido 37 segundos cuando Kike García, exjugador rojillo, abrió el marcador con un remate ajustado tras un preciso centro de Carlos Martín. El tempranero gol condicionó los primeros compases de un duelo disputado bajo una intensa lluvia.

Por su parte, el Osasuna, mermado por la ausencia de su estrella Bryan Zaragoza, respondió con una volea de Bretones que se marchó desviada. Aunque el Alavés mostró una gran organización defensiva, los locales incrementaron su intensidad, llegando a reclamar un posible penalti sobre Budimir que el VAR desestimó por falta previa.

Reacción navarra y remontada momentánea

Tras una primera parte discreta, el técnico rojillo, Vicente Moreno, ajustó su equipo con la entrada de Raúl García de Haro. Los cambios surtieron efecto y, en el minuto 60, Budimir empató el partido en una acción disputada en el área. Seis minutos después, Rubén García firmó el 2-1 con un potente disparo de falta que desató la euforia en la grada de El Sadar.

El Osasuna parecía encaminado a la victoria, pero el Alavés no se rindió. En el tramo final, una rápida combinación entre Carlos Vicente y Kike García culminó en el segundo gol del delantero, sellando el empate definitivo.

Palabras de Coudet

El técnico del Alavés, Eduardo Coudet, valoró positivamente el resultado: “Es un buen punto de partida para arrancar. Este es un estadio muy difícil, y en una semana turbulenta hemos mostrado sacrificio y entrega”.