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"Alivio" entre los trabajadores de la planta alavesa de Talgo tras abrir negociaciones con Sidenor
La fábrica tiene pedidos hasta 2030 pero urge "un plan industrial"
Vitoria - Publicado el - Actualizado
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Arranca formalmente el proceso para que el presidente de Sidenor, José Antonio Jainaga, pueda hacer una oferta de compra parcial o total de las acciones de Talgo.
El consejo de administración del fabricante de trenes de origen vasco ha autorizado la negociación tras el interés mostrado el pasado jueves por la empresa metalúrgica, lo que supone darle acceso a sus cuentas.
bendición institucional
Talgo ha comunicado este lunes su decisión a la Comisión Nacional del Mercado de Valores, antes de la apertura de los mercados. Se trata de una operación que cuenta con la bendición de los gobiernos central y vasco, que podría poner su granito de arena entrando en el capital.
El objetivo de la metalúrgica vasca es hacerse mínimo con el 29,9% de las acciones de Talgo que pertenecen al fondo de inversión Trilantic. Fundado por exdirectivos de Leman Brothers, Trilantic quiere vender su trozo del pastel, el más grande, y de no haber sido por el veto del Ejecutivo central, que arguyó razones de “seguridad nacional”, ya se habría hecho con él el grupo húngaro Magyar Vagon.
Fábrica de Talgo en Rivabellosa (Álava)
Esa posibilidad y la incertidumbre posterior tenían muy preocupados a los más de 700 trabajadores de la fábrica de Rivabellosa, la más grande de las dos plantas de producción que tiene Talgo en España. Ahora respiran algo “más aliviados” con la posible solución de Sidenor.
Así lo confirma a COPE Euskadi, Kepa Alcaine, de CCOO, el sindicato mayoritario de la planta alavesa. “Teníamos miedo de que al ser una empresa extranjera (Magyar Vagon) copiara nuestro producto y luego se llevase la fábrica al extranjero. Ahora al ser una empresa vasca (Sidenor) estamos mucho más aliviados. La gente está más tranquila, a la espera de ver qué pasa”.
arraigo vasco
Lo que necesita Talgo, explica, es un “plan industrial” que de salida a la amplísima cartera de pedidos que llegan hasta “2030”.
La compra por parte de Sidenor podría devolver a Euskadi la sede social de Talgo ahora ubicada en Madrid. Para garantizar el "arraigo" y que no se destruyan empleos el líder del PP Vasco, Javier De Andrés, ha propuesto que las Fundaciones de Kutxabank inviertan en Talgo, para que no pierda este último tren.