Aumenta la desigualdad entre pobres y ricos en Euskadi
Pero el sistema público de protección social ha parado el golpe de la pandemia al bajar la tasa de pobreza por primera vez en los últimos años
Madrid - Publicado el - Actualizado
1 min lectura
Pese a los estragos de la pandemia la pobreza en general ha bajado “notablemente” en Euskadi. Ha pasado del 6,1% de 2018 al 5,6% de 2020. Pero hay dos indicadores que se han incrementado y “preocupan”. La pobreza infantil, que afecta ahora al 11,7 % de los menores de 14 años, la tasa más alta desde el 7,3 % de 2008, y vinculada con el acceso a comida proteínica, frutas y verduras. Y el aumento de la desigualdad social debido a que en este periodo las personas de clase alta se han enriquecido más y han aumentado su distancia con los más desfavorecidos, que no se han empobrecido.
Muro social
Esta son algunas de las conclusiones de la Encuesta de Pobreza y Desigualdades Sociales en Euskadi 2020 presentada por la consejera de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales, Beatriz Artolazabal, quien ha destacado que el estudio demuestra que el sistema público de protección social ha funcionado. “Fuimos capaces de parar el golpe con medidas como los complementos a los ERTE, la flexibilización en el pago de la RGI, el aumento de las AES y la puesta en marcha de programas sociales contra la pandemia”, ha destacado.
La encuesta bianual refleja que un 90 % de la población vasca vive en situación de bienestar a pesar de haber sufrido una situación de pandemia.
El informe señala que la pobreza real, que afecta sobre todo a familias de origen extranjero con menores y sin estudios cualificados, ha caído del 6,1 % al 5,6 % entre 2018 y 2020, el nivel más bajo desde 2014, aunque ha subido en el caso de las familias monoparentales (sobre todo en las monomarentales) y de las que tienen menores a su cargo.
Esta evolución positiva supone una ruptura del empeoramiento casi continuado hasta 2018.