El obispo de Vitoria pide evitar grandes reuniones familiares para primar la salud

Don Juan Carlos Elizalde nos invita en su carta de Navidad a celebrar el nacimiento de Jesús "salvando vidas" y a tener "gestos en la distancia" con los más vulnerables

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Don Juan Carlos Elizalde, obispo de Vitoria

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

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Ante la Navidad más difícil el obispo de Vitoria, Don Juan Carlos Elizalde, ha pedido vivir estas fiestas "en casa", para primar la salud de los más mayores y de las personas de riesgo. En su carta de Navidad ha advertido que hay que posponer los encuentros familiares porque ahora toca "salvar vidas" y ello pasa por intentar evitar la movilidad y los contactos que no sean imprescindibles.

Monseñor Elizalde ha recorrdado en su mensaje la importancia de tener "gestos" con los más necesitados para evitar el "aislamiento social" acentuado por la pandemia. "Recordemos que Jesús nació entre los pobres", ha señalado.

Recuerdo a los fallecidos por covid

Elizalde ha tenido también palabras de recuerdo para los fallecidos por covid. Rememorando la homilía de la misa en su memoria celenrada el 25 de julio en la Catedral de María Inmaculada, ha asegurado que “reza por todas ellas y por sus familias y amigos”. “Celebremos el nacimiento de Jesús salvando vidas”, así es como ha encabezado el obispo de VItoria su misiva a los alaveses, a quienes reclama vivir estas fiestas en casa “siendo responsables, primando la salud de los más mayores y personas de riesgo, posponiendo las reuniones familiares y teniendo gestos de cercanía hacia los más vulnerables este año en la distancia”.

Además, ha insistido en ser conscientes de lo que estamos pasando para “dejar atrás aquello que siempre fue secundario y centrarnos en lo verdaderamente importante, como es la salud de nuestros mayores, la educación de nuestros hijos, los trabajadores esenciales, las reconciliaciones personales y la solidaridad mutua”. “Coloquemos estos días en la mesa al Niño Jesús para tener presente que Dios se hizo uno de nosotros para compartir y acompañar nuestras vidas”, ha propuesto.

Decisiones dolorosas

En su tradicional mensaje ha felicitado a sanitarios, comerciantes, trabajadores de todos los servicios, instituciones públicas y organismos sociales como Cáritas y Berakah entre otros, por hacer posible la Navidad y ha recordado la labor de la Iglesia alavesa y las decenas de acciones desde antes incluso del inicio de la pandemia para frenar contagios y ayudar a la población.

“Hemos puesto todo nuestros bienes materiales y humanos al servicio del bien común, con decisiones dolorosas pero necesarias, seguros de que, como parte del tejido social alavés y motivados por la convicción cristiana de ayudar al prójimo, nuestro papel debía y debe estar siempre encaminada a la fraternidad humana”. También ha destacado la labor de Cáritas y ha alertado que el número de familias atendidas se ha multiplicado por dos.

Mensaje a los más pequeños

También a los más jóvenes y pequeños, les ha agradecido que esta Navidad “llamen más a sus abuelos, amigos y familiares para sembrarles de alegría desde la distancia”. A estos primeros les ha animado a madurar la fe y les ha alentado a “romper con esa costumbre de no acudir a la misa dominical o a los sacramentos para dar un paso y sentirse arropados por el Señor y por la comunidad cristiana”.

Ha terminado su mensaje bendiciendo a todas las personas que viven en la Diócesis de Vitoria –Álava, Treviño y Orduña– y deseando un “feliz 2021 esperanzados en las buenas noticias sin olvidarnos de nadie”.