Tasa turística en Euskadi: "No es el momento, va a retraer"

La tasa turística existe en 21 países de la Unión Europea. Italia la cobra en más de 30 ciudades, con Venecia como la única en el mundo donde desembolsas 5 euros por entrar, y la vecina Portugal en más de una docena de municpios. En España solo se aplica en Cataluña, desde 2012, y en Baleares, desde 2016, con varias actualizaciones del coste. Tras un intento fallido en Valencia ahora parece que la siguiente de la lista será Euskadi.

El Gobierno vasco entiende que es el momento, que se dan las condiciones para implantar una tasa turística que defiende no sería disuasoria. Lo contrario piensa Gema Guillermina, directora del hotel NH Canciller Ayala de Vitoria, quien ha advertido de que “no es el momento”, al menos en Álava.

En COPE Euskadi ha destacado que Bilbao, San Sebastián y Vitoria tienen “disyuntivas diferentes” y en la capital alavesa “ha costado muchísimo tener esta demanda y que la gente venga y disfrute de la ciudad”. En su opinión, el nuevo impuesto “va a retraer" al visitante. “Todos queremos participar de un turismo responsable, pero no es momento porque si te puedes quedar a 15 kilómetros sin pagar ese impuesto para qué lo vas a pagar", ha añadido.

¿Qué piensan los turistas del nuevo "impuesto autonómico"?

En Bilbao preguntamos a Inés, turista portuguesa de viaje con sus padres por el País Vasco y residente en Amsterdam. Nos dice que aceptaría el impuesto: "ya es muy normal en todos los países".

Las catalanas Rebeca y Carla, en ruta por la cornisa cantábrica, pagarían la tasa de buen grado, aunque hay un "depende" de si ese dinero redunda en "mejorar" el sector.

La intención del Gobierno vasco es presentar una propuesta en seis meses a partir de septiembre. Estos días vamos conociendo más datos, se trataría de un “impuesto autonómico” y no de una tasa municipal.

Menos de 10 euros con bonificaciones y exenciones

Así lo ha desvelado el consejero de Comercio, Turismo y Consumo, el socialista Javier Hurtado, quien avanza que el importe sería menor a 10 euros y la cantidad variará según el tipo de alojamiento, no es lo mismo un camping que un hotel de 5 estrellas.

Lo que se gravarían serían las pernoctaciones por lo que el impuesto lo cobrarían los propios establecimientos hoteleros. El Ejecutivo autonómico aún debe clarificar "la fórmula" en la que distribuir ese dinero recaudado que iría “a favor del turismo”, al sector, “a sus infraestructuras".

El consejero, en declaraciones a la radio pública vasca, ha señalado que habrá bonificaciones y exenciones según la edad de los visitantes, como los menores de 16 años, y otras circunstancias, como si es temporada alta o baja. Entre las incógnitas figuran cuánto sería el tiempo máximo de aplicación de la tasa turística, en Cataluña son 7 días, y si se cobraría solo por noche o también por persona.