Urkullu sólo aprobará medidas avaladas por los jueces vascos

El lehendakari, Iñigo Urkullu, no quiere correr riesgos después del varapalo de los jueces vascos y por eso les consulta antes de aprobar el decreto, para ajustarse al margen de actuación que le den.

Es la sala presidida por Luis Ángel Garrido, el magistrado que ordenó la reapertura de la hostelería, la que ha de valorar las nuevas medidas y ya tiene un criterio de la Fiscalía contrario al cierre perimetral y al toque de queda sin estado de alarma. Quiere evitar exponerse a "periodos de indecisión y a la incertidumbre de los recursos".

Urkullu, "sin esperanza" en un cambio de postura en la línea del TSJ de Baleares que ha autorizado el toque de queda de 23 a 6 horas, va a aprobar solo limitaciones que gocen de seguridad jurídica y descarta, de momento, el embrollo que supone acudir al Tribunal Supremo.

Medidas razonables

Así que en principio la limitación de agrupaciones a 4 personas si la tasa de incidencia acumulada supera los 200 casos, y de los horarios y aforos en hostelería y comercio, parecen ser las restricciones que se mantendrán. Está por ver qué pasará en los municipios en rojo con el deporte escolar o el consumo en el interior de los bares, ya recurrido y pendiente de resolución. El lehendakari sí ha deslizado que las medidas serán "razonadas y razonables con respecto a tendencia positiva actual".

"Siempre he respetado lo que digan los tribunales. Conozco la postura de la Fiscalía y no tengo nada más que decir. Las medidas que adoptemos contemplarán las garantías suficientes", ha subrayado Urkullu.

Mañana conoceremos la resolución del TSJPV antes de que se reúna por la tarde el Consejo Asesor del Plan de Protección Civil de Euskadi (LABI) en el que se cerrará definitivamente este decreto antes de que sea firmado por el lehendakari. Será en torno a las 18:00 horas cuando conoceremos las nuevas medidas, que entrarán en vigor cuando decaiga el estado de alarma a las doce de la noche del sábado y por un periodo de 4 ó 6 semanas.