"Ni perdono ni olvido"

Francisco Ruiz recibió 12 balazos en el mismo atentado en el que ETA asesinó a su protegido

Santiago Ruiz de Azúa

Santander - Publicado el - Actualizado

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La mañana del 9 de febrero de 1976 Francisco Ruiz Sánchez, policía municipal, acompañaba al alcalde de Galdácano a por su coche cuando dos miembros de ETA les ametrallaron. El alcalde,Víctor Legorburu, murió en el acto mientras que su escolta, a pesar de recibir doce balazos, salvó la vida.“ Para mi fue un calvario,después de estar cinco meses en el Hospital de Basurto salí de allí en silla de ruedas. Fue duro” recuerda Francisco Ruiz en esta entrevista a la cadena COPE en Euskadi.

Tras el atentado la vida de Francisco cambió 180 grados.” Cuando mi mujer me sacaba en silla de ruedas de paseo por el pueblo, gente que conocía de toda la vida se iban a la acera de enfrente.Y no porque no me quisieran saludar sino porque tenían miedo de ser vistos hablando con una víctima del terrorismo”.

Antes de este atentado en el que Francisco, como escolta del alcalde resultó herido, ya se movían con precaución por otro atentado anterior que había sufrido el alcalde. Además, al poco de ingresar Francisco como Policía Municipal ETA asesinó a otro compañero “Llevas tres meses de policía y asesinan a un compañero ya estabas con un poco de miedo”.

Durante los cinco meses que Francisco Ruiz estuvo ingresado en el Hospital las únicas visita que recibió fue la de un alto cargo militar del cuartel de Garellano y la del Gobernador Civil que me dijo que me iba a mandar una colección de libros.” Esos libros nunca llegaron, el Gobernador fue a sacarse la foto”.

No ha podido perdonar. “Ni perdono ni olvido, Pero no porque no quiera perdonar sino porque los etarras asesinos no se quieren perdonar, no se arrepienten del mal que han hecho a sus víctimas”.

Francisco Ruiz guarda un gran recuerdo de su protegido, el alcalde al que asesinó ETA en el mismo atentado y se emociona cuando en la entrevista saluda al hijo de Víctor Legorburu y le confiesa que siempre que regresa a Galdácano también visita la tumba de su padre en el cementerio