Bilbao pone freno a las viviendas turísticas: "Hemos detectado un desequilibrio"

El Ayuntamiento de Bilbao aprobará en el pleno ordinario de este mes de enero una modificación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) para controlar el uso de habitaciones y viviendas turísticas. Cambios que se pondrán en marcha en los barrios más afectados  como el Casco Viejo, Bilbao La Vieja, Matiko, Abando e Indautxu y Olabeaga, para poner freno a su proliferación de inmuebles que ya causan molestias a las comunidades de vecinos. 

En este sentido, entrevistado en COPE Euskadi, el concejal de Planificación Urbana, Proyectos Estratégicos y Espacio Público, Asier Abaunza, ha querido dejar claro que "En Bilbao no tenemos un problema con esta cuestión, lo que sí hemos querido es ser precacivos porque hemos detectado un desequilibrio", cuenta. 

Entre las principales medidas destacan aquellas que condicionas a las habitaciones y viviendas de uso turístico, ya que solo podrán estar en la primera planta de los edificios residenciales. Por otra parte, esta nueva regulación establece, por primera vez, que la residencias de estudiantes podrán alquilar habitaciones a turistas, aunque con la excepción de que sólo se podrá en en los meses de verano y reservando el 30% de las habitaciones a estudiantes. Además, será necesario un acceso independiente y con recorrido accesible (que, además, no condicionará posibles necesidades de la comunidad); se limitará a un alojamiento turístico por edificio; y se permitirá compatibilizar de forma alternativa el estar empadronado en esa vivienda y su uso turístico.

Los datos proporcionados por el Ayuntamiento de la Villa muestran cómo "Bilbao está por encima de la media de Bizkaia y de Euskadi", en cuanto a camas ofertadas por habitantes, ya que el Botxo se sitúa en 14 plazas, cuando la media es de 10 por cada 10.000 habitantes. 

Por todo ello, se abordará la tramitación de un cambio normativo con el que se establecerán más restricciones a la implantación de este tipo de medidas distinguiendo, además, los ámbitos de mayor concentración de HUT y VUT (en los que el planeamiento será todavía más exigente y restrictivo). "Se esta concentrando mucha de esta oferta en el entorno del centro de la ciudad y con excasa presencia en otros barrios más periféricos y queremos equilibrar dónde se implantan este tipo de actividades y ponerle coto a las habitaciones, que proliferan donde no es voluntad del Ayuntamiento que se implanten", asegura.