Una repartidora de Correos vasca va a entregar un paquete y una señora la saca de sus casillas: "Lo que tengo que hacer"

Esta vizcaína se ha hecho viral en TikTok por su experiencia en un pueblo en el que tenía que llevar un envío a su destinatario, que no estaba en el momento en el que llega Alba

TikTok: @albitamate

La repartidora de Correos

José Manuel Nieto

Publicado el - Actualizado

3 min lectura

      
      
             
      

En un mundo donde las redes sociales tienen el poder de hacer viral cualquier momento cotidiano, una repartidora de Correos de Vizcaya se ha ganado la atención de miles de usuarios en TikTok. Su experiencia al intentar entregar un paquete en un polígono industrial y la interacción con una señora que intentó "dirigir" su trabajo se convirtió en un inesperado éxito viral.

Alba Mateo, la repartidora protagonista, compartió un video que rápidamente se extendió por la red, acumulando miles de reacciones y comentarios. En él, Alba narra su vivencia con una mujer que, tras intentar entregar un paquete a su destinatario, se encontró con una actitud poco común, que la hizo perder la paciencia.

Todo comenzó cuando Alba llegó al polígono industrial para entregar un paquete, pero, como ocurre en muchos casos, el destinatario no estaba presente en el momento de la entrega. Según las normativas de Correos, cuando alguien no se encuentra en su domicilio o en la dirección especificada para recibir el paquete, el repartidor marca el estado como "ausente" y deja un aviso para que el destinatario lo recoja más tarde en la oficina de Correos o en otro punto habilitado.

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Logotipo en vehículo de Correos de España, Santa Cruz de Tenerife, Islas Canarias

Hasta aquí, todo parecía en orden. Sin embargo, lo que Alba no esperaba era la intervención de una señora que, al ver que no había nadie en la ubicación indicada, decidió tomar la situación en sus manos. Según Alba, la mujer se acercó corriendo y, en lugar de aceptar el procedimiento habitual, comenzó a darle instrucciones sobre cómo debía proceder: "¡Ay! No está, ¿eh? Pero si no, le acercas el paquete donde esté", le dijo la señora, lo que sorprendió a la repartidora.

una señora la saca de sus casillas

Visiblemente molesta por la actitud de la señora, Alba no pudo evitar responder de forma tajante y directa. En el video, Alba relata con una mezcla de incredulidad y humor lo que ocurrió a continuación:

"¿Perdón?, repítamelo. ¿Tú ves dos nóminas en mi cuenta bancaria? ¿Ves que sea la cartera personal de alguien en concreto? No, ¿verdad? Pues cariño, yo vengo aquí, no está: ausentito", comenzó Alba, aludiendo a que no era su responsabilidad tomar decisiones que no estaban dentro de sus funciones.

      
             
      

A la sorpresa de Alba se sumó otro intento de la señora de tomar el paquete. "¿Lo puedo recoger yo?", le preguntó. La repartidora, ya molesta por lo sucedido, no dudó en explicarle que no, que la señora no podía recoger el paquete en nombre de otra persona, y añadió: "No sé de dónde viene, de dónde sale, a dónde va y qué pretende la vida. Pero no lo puede recoger usted. Se lo agradezco, ¿eh? Pero ya está".

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Cartero en motocicleta de Correos, Lanzarote, Islas Canarias, España

El video, grabado por Alba en un tono irónico pero firme, rápidamente se volvió viral en TikTok, donde miles de usuarios comentaron y compartieron la anécdota. La frase "¿Tú ves dos nóminas en mi cuenta bancaria?" se convirtió en uno de los puntos más comentados del video, reflejando la frustración de muchos trabajadores que, al igual que Alba, deben lidiar con situaciones imprevistas mientras realizan su trabajo. La repartidora de Correos, además, dejó claro que entendía la buena intención de la señora, pero que no podía permitir que alguien le indicara cómo hacer su trabajo.

Una repartidora de Correos vasca

"Vosotros esto veis normal. Yo entiendo que sea por ayudar. Lo entiendo. Pero una cosa es ayudar de, oye, lo puedo recoger yo y que no lo sepas. Y otra cosa es que vengas a decir a mí lo que tengo que hacer en mi trabajo, cariño. Es que no", expresó Alba, dejando claro que, aunque comprendía la intención de la mujer, no estaba dispuesta a ceder ante una solicitud que no respetaba el protocolo de su trabajo.

      
             
      

La situación desató un debate en las redes sociales sobre el respeto a las tareas y responsabilidades de los demás. Muchos usuarios se pusieron del lado de Alba, defendiendo que, si bien la señora probablemente intentaba ayudar, no debía interferir en el trabajo de la repartidora, quien solo estaba cumpliendo con su tarea de acuerdo con las normativas de Correos.