El detalle clave en la vuelta al cole: "Tan importante como las notas"

Volver al cole tras las vacaciones es para algunos niños un cambio importante y no solo porque lleguen de un periodo de vacaciones y de mayor libertad. No solo son los horarios y el volver a tener que estudiar y hacer ejercicios.

En algunos casos cambian de cole, o de etapa escolar, y otros incluso varían los compañeros con los que están acostumbrados a interactuar. Tampoco todos los pequeños tienen la misma capacidad de adaptación y el foco debe ponerse en la convivencia.

Una relación sana entre compañeros no es solo buena en el aspecto clave de evitar casos de acoso o niños que se queden atrás en lo personal, va directamente relacionado con las notas y el rendimiento escolar.

UN NIÑO FELIZ RINDE MÁS

El psicólogo y educador, Javier De Haro, ve fundamental el hacer un esfuerzo en ese sentido. "Un niño feliz rinde mejor" y es que además de las puntuaciones en los exámenes, todo el mundo desea que sus niños sean felices.

Un niño adaptado lo tendrá más sencillo para hacer equipos, el trabajo en grupo y estar a gusto y centrado en las explicaciones de los profesores. "Seguramente si pensamos en nuestra etapa en el colegio de lo que más nos acordamos es de las amistades que hicimos, de esos buenos ratos". Eso es lo que hay que lograr. 

Sin embargo, no siempre es sencilla la meta. "Se ha demostrado que la autoestima infantil tiene mucho que ver con la autonomía y por eso no es solo que vayan felices, sino que aprendan competiciones que viene derivado de ello. Hay adultos  con muchos conocimientos, pero con dificultad para expresarse en público y sirve de poco".

Cada niño es un mundo. "A veces los medimos a todos con el mismo rasero y no. Es importante que ese primer escalón es saber cómo es el niño y no la expectativa que tenemos en él. Con base en eso hay que ayudarle  a subirles los siguientes escalones desde casa".

Y es que no es solo una cuestión del colegio. Javier pone un ejemplo. "Si el chico es retraído, en vez de pretender que juegue con 20 niños en un parque, es mejor invitar a un amiguito en casa y que sea la adaptación poco a poco".

Lo recomendable es hablar mucho con los niños. Por un lado, con los que se ven apartados, pero también con el resto. "Hay un valor importantísimo que es la empatía. Hay estudios que muestran que si hubiera más empatía, habría menos bullying".

Pone el foco en la prevención. "No hay que esperar a que pasen cosas y sí, darles ejemplo. Podemos pedirle a los chicos que sean amables, pero si ven que nosotros no lo somos no servirá de mucho".

En el entorno de los coles también considera más importante que se centren en esa inteligencia emocional y que contaran hasta en las notas, porque "no es solo conocer las emociones, es autocontrolarnos, es encontrar motivaciones y hay ya Comunidades autónomas que meten eso en el currículum".

Ser un buen ejemplo para ellos, hará que tanto en el ámbito escolar como en el personal se vaya fraguando una personalidad más positiva desde que son pequeños y será bueno para ellos y para el grupo.