psicología

Redes sociales y felicidad: ¿Es todo un espejismo?

El psicólogo Javier De Haro nos habla de uno de los grandes anhelos de mucha gente que es ser feliz

Maite Fernández

Murcia - Publicado el

6 min lectura

      
      
             
      

Uno de los objetivos de casi todas las personas en esta vida es ser feliz, pero a veces no saben distinguir la felicidad y otras obstaculizan la llegada de ese sentimiento de plenitud. Muchas veces es una cuestión de actitud.

Si se busca la felicidad en los demás, o en lo superfluo el camino se aleja y también el objetivo de poder asumir que se es feliz. El psicólogo y educador, Javier de Haro ofrece algunas pautas y consejos prácticos para acercarse a esa felicidad en su estado más pleno.

Para empezar el proceso hay que tener predisposición y una una buena actitud. "Al final la actitud que tenemos es fundamental y también la percepción que tenemos de esa felicidad es la que marca un poco la regla. Tú puedes vivir pensando siempre en lo que no tienes o puedes sentirte agradecido y valorar lo que tienes. Cambia mucho. Es un concepto complicado".

En la búsqueda hay que asumir ciertas ideas, como la dificultad que supone ser feliz a tiempo completo. "Es casi imposible ser feliz todo el tiempo, porque al final la vida siempre va a tener cosas que tú no controlas, que tú no te esperas, que no las pides tú. Entonces, esos momentos es muy difícil afrontarlos de una forma feliz.  Hay que afrontarlos, hay que vivirlos y hay que aceptarlos, pero es importante entender esto,  porque de esa forma los momentos felices  los podemos aprovechar y vivir mejor".

"Es cierto que siempre nos ha interesado, desde los filósofos clásicos, el tema de la felicidad, pero hoy en día nos estamos llevando a un extremo que es muy peligroso. Por el tema de las redes sociales, por cómo se han deformado movimientos como la psicología positiva. Estamos demasiado obsesionados con la felicidad, hasta el punto que siempre parece que nos faltan cosas para ser felices y está afectando, incluso, a nuestra salud mental

fingir felicidad

La deriva de las redes sociales lleva incluso a fingir felicidad, a demostrar a los demás que aunque sea mentira se tiene la mejor pareja, el mejor coche o el mejor plan del mundo. A veces se reduce esa sensación de felicidad a los Me gusta.

      
             
      

"De hecho, fíjate, hay quien habla del engagement, de ese vínculo que tú generas con según qué personas  en las redes sociales y genera más relación, genera más vínculo positivo, por así decirlo, aquellas personas que se muestran también vulnerables, que muestran que todo no es de color de rosa. Al final, nosotros decidimos si queremos compararnos (con modelos que son irreales o si realmente cogemos aquello que nos ayuda a las personas para potenciar nuestra felicidad, por así decirlo.

Una cosa es clara y es que ser feliz no es algo que contenga los mismos ingredientes para todo el mundo, aunque sí hay claves comunes sobre todo en la forma de conseguirla y no es fácil en casi ningún caso.

El psicólogo y educador Javier De Haro

Ni tener dinero, ni amor, ni tan siquiera salud te asegura el sentimiento de plenitud. Hay que pelear por la felicidad. Para lograrla y especialmente para mantenerla en el tiempo. "Sí, la felicidad se pelea y mucho y para ser feliz tienes que hacer cosas."

      
             
      

"Además, está demostrado por la ciencia que las personas que hacen cosas para ser felices, realmente son más felices. Al final, pasa una cosa muy curiosa y es que te das cuenta realmente de lo que necesitas cuando lo pierdes. Por ejemplo, muchas veces no valoramos el tiempo, hasta que hay una enfermedad, hasta que hay un problema de salud".

Hay estudios que aconsejan ciertas prácticas para buscar esa felicidad. "Hay cosas que además, fíjate que  son cosas que nos decían ya nuestros abuelos, pero que la ciencia las respalda ahora. Hay que cuidar mucho las relaciones.  Es decir, nosotros somos personas sociales por naturaleza y ya no solo a nivel pareja."

"Hay estudios que hablan de que las personas que sienten que no hace falta tener un millón de amigos, pero que tienen personas en las que confiar y personas que a ellas les importan, son más felices".

      

la gratitud

Un factor fundamental para el experto es la gratitud, pero no se refiere al dar las gracias a los demás, es un concepto más de reflexión. "Se trata de cada noche hacer un ejercicio de dar las gracias por algo que tenemos."

"Eso parece una tontería, nos ayuda a poner el foco no solo en lo que nos falta, sino en lo que tenemos.  Al final, siempre estamos muy pendientes de lo que nos falta  y es muy importante ser conscientes de los afortunados que somos al tener ciertas cosas importantes".

También se pierde mucho el tiempo en desear lo que tienen los demás, en vez de invertir esa energía en conseguir los objetivos marcados. "Llega un momento que confundimos lo que queremos con lo que necesitamos y no es lo mismo. De hecho, había un anuncio de una marca sueca muy conocida  que decía que era más rico, al final no el que más tenía, sino el que menos necesitaba. Y es un poco esa la idea, al final, nos engañamos a nosotros mismos  y queremos muchas cosas que realmente no necesitamos".

Pixabay

Una pareja se muestra feliz, sin móviles

hacer felices a los niños

Los niños merecen capítulo aparte. Son en muchas ocasiones con muy poco, pero hay que preguntarse cómo hacerlos felices y poner todo el empeño en que sin vivir en una burbuja sean lo más felices posibles.

"Pues, fíjate, los niños, realmente, se ha demostrado que hay cuatro cosas que son fundamentales para ellos y la última nos va a sorprender. La primera es tiempo, que le dediquemos tiempo, lo que podamos".

Valen todos los momentos que sea de calidad. "No hace falta que sea siempre jugar. Puedes compartir con él e ir a hacer la compra  o únicamente sentarte a mirarle y estar con él, pero necesitan nuestro tiempo".

"En segundo lugar y muy importante es la autonomía. Necesitan que les enseñemos a ser autónomos y aprender a hacer sus cosas y que les dejemos hacerlas. Además, un niño autónomo, al final va a ser su propia fuente de felicidad y no va a depender de nosotros. (6:24) La tercera cosa es también muy importante yes que deben sentirse amados".

Da algún ejemplo De Haro para entender estas cuestiones relativas a los pequeños de la casa. "No hace falta decirle que es el mejor del mundo,  pero sí hay que decirle que le queremos mucho y que estamos orgullosos de ellos".

"Y la última, que se ha demostrado que es fundamental para que un niño sea feliz necesita unos padres felices, porque si tú estás hablando de forma coloquial, amargado, eso es lo que le vas a transmitir a tu hijo. Por eso es muy importante que ese tiempo que le dedicas,  ese compartir momentos,  también nosotros nos preocupamos por ser felices por ellos".

El último consejo es administrar las expectativas. Si quieres un viaje a Nueva York que lleva un proceso, no dejar de disfrutar de las cosas más pequeñas. "Es muy importante aprender a disfrutar de las pequeñas cosas, porque muchas veces, cuando queremos ser felices,  parece que nos planteamos grandes objetivos y hay que disfrutar por el camino, de las pequeñas cosas buenas que tenemos cada día".

En unos casos habrá que dejar de priorizar a los demás, y otros dejar de pensar solamente en uno mismo para intentar atrapar la felicidad.